El celular y las balas

Mientras que la investigación por la muerte del policía Diego Scremín fue cerrada, una serie de irregularidades en la investigación motivaron la apertura de dos sumarios internos a funcionarios judiciales y policiales. La misteriosa desaparición del celular del muchacho del ámbito del juzgado y la pérdida de 16 balas por parte de la comisaría interviniente llevaron al juez Alfredo Ivaldi Artacho a instruir sendos sumarios administrativos para esclarecer esos extravíos. Tras una investigación interna, el celular del policía fue recuperado un año más tarde en manos de un particular y devuelto a la madre del joven. Por la pérdida de los proyectiles, la Unidad Regional II inició una investigación en la seccional 11ª, entonces a cargo de Francisco Gambacurta. La madre de Scremín denunció, además, que del auto de su hijo faltó un handy y que el estéreo que le devolvieron en esa repartición no era el original sino uno robado.