Para tener en cuenta

* El estado físico de Ezequiel González. En la práctica de ayer demostró una vez más su enorme capacidad para administrar en función de equipo los ritmos del partido, pero sus tres meses de inactividad debido a una lesión le pasaron factura. Por eso se lo notó discontinuo en algunas jugadas y bastante impreciso cuando tuvo que pasar la pelota.

* La nueva y vieja posición de Vitamina Sánchez. Si Russo decide encarar el Apertura y la Sudamericana con gente de buenos pies en la mitad de la cancha, seguramente la llegada del Equi lo obligará a reacomodar algunas piezas y en ese desparramo a Pablo Sánchez le tocaría la función de un cinco más adelantado. Claro que esta alternativa se muestra válida si la apuesta del DT contempla a un solo delantero de punta, como fue el caso del chaqueño Herrera en el ensayo de ayer a la mañana. Igualmente por conocimiento de causa y por experiencia, Vitamina es el típico un jugador que subsana cualquier falencia apelando a la inteligencia.

* Las subidas permanentes de los laterales

Cuando un equipo juega con un solo atacante neto, el desprendimiento por sorpresa de los laterales pasa a ser el abastecimiento más creíble a la hora de juntar maniobras ofensivas en el mediocampo. Por aquello de que los volantes se multiplican como dos aviones por los andariveles, Russo quiere un equipo con mucho juego por los costados y la permanente referencia del delantero de punta como última alternativa de llegada.