El perjuicio deportivo de no contar con Bassedas

Christian Bassedas dejó el fútbol y también un vacío. Tanto en este deporte como en Newell's, una institución que cumplió con todo lo que el volante pidió. Pero más allá de la sorpresa y el estupor por la determinación del ex velezano, sin dudas que el más perjudicado por esta situación es el equipo rojinegro, que con esta determinación de Bassedas dilapidó un tiempo precioso que difícilmente recupere en procura de lograr el anhelado protagonismo que el pueblo leproso espera.

Es que Bassedas, el primer refuerzo que sumó Newell's, había acordado su vinculo con la institución el 17 de junio y al día siguiente hizo su presentación en sociedad en Bella Vista para entrenar por primera vez con sus compañeros. La premisa era ponerlo bien física y futbolísticamente ya que venía de un par de meses sin hacer partidos oficiales. El cronograma de trabajo fue cumplido a rajatabla. Y a medida que el volante avanzaba en su recuperación, la dirigencia rojinegra fue rodeándolo de buenos jugadores y edificando la base del equipo en torno suyo con la firme convicción de conjugar un plantel para pelear el campeonato.

Todo marchaba sobre ruedas. Los nombres fueron llegando y el plantel armándose y compenetrándose con la idea. Incluso parecía que había sacado una pequeña luz de ventaja a los demás equipos en la preparación al haberse armado más rápido, mientras que la mayoría todavía pugna por conformar sus planteles. Todo venía a pedir de Ñuls.

Todo hasta que Bassedas, con su decisión, decidió cambiar el rumbo. Ahora, Newell's deberá barajar y dar de nuevo. Deberá no sólo traer otro refuerzo sino también encontrar otro conductor. Por algo el técnico Héctor Veira reconoció ayer que había pensado un Newell's protagonista, en el que Christian ocupaba un rol preponderante como conductor del equipo. "El fue contratado para conducir el equipo nada menos, y ya no lo tenemos, es una complicación", admitió el Bambino quien deberá agudizar el ingenio para encontrar el modo de reemplazarlo.

Más allá del respeto que se pueda tener por su decisión, flaco favor le hizo Bassedas a Newell's al hipotecar un mes de trabajo, en un equipo que el Bambino fue moldeando a su alrededor. Consciente o no, su alejamiento le causó un perjuicio deportivo difícil de recuperar al club.