| sábado, 19 de julio de 2003 | El desprecio a la prensa libre Londres. - El profesor de la Universidad de Westminster, Steven Barnett, dijo ayer, que "un hombre puede haber muerto como resultado del desprecio del gobierno por una de las piedras angulares de la democracia: la libertad de prensa". Barnett criticó ampliamente al gobierno de Tony Blair por ignorar la importancia de preservar el secreto de las fuentes de información, al conocerse la muerte de David Kelly.
"El caso de David Kelly, el experto de armas del Ministerio de Defensa, a quien los ministros señalaron como la fuente de la historia de Andrew Gilligan sobre que el gobierno exageró la capacidad de armas de Irak, levanta cruciales cuestionamientos acerca del funcionamiento de la libertad de prensa y la relación entre el gobierno y los periodistas", sentenció este profesor. "Una de las diferencias fundamentales entre las democracias genuinas y los regímenes totalitarios es la libertad de prensa", opinó.
El profesor consideró que "para que esta libertad opere efectivamente, los gobiernos deben aceptar que sus decisiones y políticas serán desafiadas, cuestionadas, investigadas y analizadas por gente que actúa independientemente y usa cualquier medio legal disponible". "Puede ser desesperadamente incómodo, y algunas veces incluso injusto. Muy ocasionalmente, como para Richard Nixon fue el Watergate, puede ser políticamente fatal. Pero la alternativa es mucho peor", indicó.
Para Barnett fue intensa la presión política a fin de encontrar un nombre que cambiara el eje del caso. "Si podían (el gobierno) comprometer a una fuente y desacreditarla, podría haber alguna chance de respiro", dijo Barnett. (Télam) enviar nota por e-mail | | |