El Chelito, ante un gran dilema

Sergio Faletto / La Capital

El Chelito Delgado está ante un gran dilema, luego del aparente fracaso de la jugosa oferta para jugar un año a préstamo en Cruz Azul de México: aceptar otra posibilidad de actuar en otro club de un país no europeo o apostar a una de las mejores vidrieras de un jugador, la selección nacional.

El propio entrenador de la selección nacional, Marcelo Bielsa, le habría sugerido a Delgado que es un firme candidato a ocupar un lugar en el equipo que comenzará a jugar las eliminatorias este año.

En la misma línea de razonamiento, el director técnico de Rosario Central, Miguel Angel Russo, se encargó de advertirle al delantero con todas las letras que a su criterio es demasiado joven y talentoso como para ir a jugar ahora al fútbol mexicano.

"Ningún jugador argentino que estuvo en la selección y se fue a México volvió a jugar para Argentina", le recordó Russo, como para que no le quedaran demasiadas dudas.

En esta línea argumental, Russo le recordó al Chelito lo que le había dicho hace casi un año a Luciano Figueroa y a los dueños de su pase: "Si me lo dejan un año va a crecer y lo van a vender mucho más caro y directamente a Europa". Sólo basta recordar que la temporada le dio la razón al técnico canalla a tal punto que Figueroa salió máximo goleador con 27 tantos, 17 de ellos en el torneo Clausura, y ahora está a punto de emigrar al fútbol europeo, justamente en una cifra muy superior a la que lo hubieran transferido el año pasado.

En cambio, el empresario rosarino que posee los derechos económicos del pase de Delgado se halla interesado en aceptar la tentadora oferta mexicana, con cuyos dirigentes se había reunido en el Distrito Federal.

En contrapartida, los dirigentes auriazules deberían escuchar el más que sensato razonamiento de los hinchas, que privilegian por sobre la contratación de figuras ultimar los esfuerzos en pos de lograr el sueño de retener a Delgado por un año más en Central, justamente para que juegue los torneos Apertura y Clausura y las Copas Sudamericana y Libertadores.

Así, entre los deseos contrapuestos del dueño de los derechos económicos y los de los técnicos de la selección y Central, así como de los hinchas canallas, se halla la decisión del propio jugador, que debe elegir entre una oferta demasiado importante en dólares de algún club no europeo y la posibilidad de apostar a seguir creciendo en Central y en la selección y, además, de jugar la Copa y el Mundial, y recién después hacerlo en Europa, donde podría ganar mucho más todavía.

Delgado decidirá después del partido de hoy.