Viedma: paseos en catamarán

Será reflotada una embarcación para realizar excursiones por el río Negro

Una catamarán que realizaba paseos por el río Negro y permanece varado en seco frente a Viedma desde hace cuatro años, fue reparado y será reflotado por iniciativa de organismos públicos y privados y puesto nuevamente en servicio en la primavera próxima.

La tarea se concretará mediante un esfuerzo conjunto de la Secretaría de Turismo de la Nación, la municipalidad de Viedma, organismos provinciales y la fundación Canoas, a la cual cedieron el manejo de la embarcación con capacidad para 150 pasajeros.

La nave, bautizada "currú leuvú" (que quiere decir río Negro en lengua mapuche) fue adquirida en un astillero de Buenos Aires en 1975 por el gobierno provincial, que la transfirió a jurisdicción municipal en 1980.

Luego de casi 25 años de uso ininterrumpido en los que realizó excursiones por el río Negro entre Viedma y la desembocadura en el mar o aguas arriba entre las frondosas islas, la nave fue retirada de servicio para ser reparada y quedó en seco en el varadero de la Prefectura Naval, sobre la costa de Carmen de Patagones.

En 2000, autoridades de policía naval realizaron la inspección técnica y determinaron la obligatoriedad de efectuar una serie de trabajos complejos y costosos, como la reconstrucción total de los dos grandes flotadores de 20 metros de largo sobre los que se apoya la embarcación.

El año pasado, la municipalidad cedió la explotación de la nave a la fundación Canoas, una entidad no gubernamental sin fines de lucro para la promoción de actividades náuticas.

El catamarán tiene 20 metros de eslora y seis de manga, cuenta con un cabina cerrada con ventanas panorámicas, servicio de bar y sanitarios y una cubierta superior al aire libre.