El huevo de la serpiente

Los hechos acaecidos en nuestra ciudad el 1º del corriente mes me traen a mi memoria una vieja película de un talentoso director sueco, titulada "El huevo de la serpiente". En la misma se hace referencia al despertar del nazismo en Alemania de la década del treinta, con la incubación de una terrible ideología que desató persecuciones racistas y genocidios. Encuentro mucha similitud con nuestra historia de gobiernos llamados constitucionales desde el año 1946, con una tendencia en sus diversas manifestaciones de protesta al uso de la pirotecnia. Cito a título de ejemplo la quema de libros por parte de bandas bien adoctrinadas al grito de "alpargatas sí, libros no". El incendio de la sede de la Casa del Pueblo, del Jockey Club, de distintas iglesias, el ataque al diario La Prensa, etcétera. En época más reciente en campaña preelectoral la quema de urnas en la provincia de Catamarca por ordas que respondían al sindicalista gastronómico y confeso ladrón Luis Barrionuevo ("Si no robáramos por seis años el país se levantaría económicamente"). Hoy observo con estupor el incendio del Museo de Ciencias Naturales Angel Gallardo con la pérdida de valiosos y en algunos casos ejemplares únicos. El incendio de la querida Facultad de Derecho, dejando la estatua ennegrecida de la señora Justicia como un símbolo de oprobio e intolerancia. En todos estos hechos los personajes son distintos pero la metodología es la misma. Aún no han aprendido de aquel libro de su líder, "La fuerza es el derecho de las bestias". Quiero terminar con una frase de ese gran escritor argentino: "No son buenos ni malos, son irrecuperables", Jorge Luis Borges. Por desgracia los argentinos nos caracterizamos por ser muy frágiles de memoria a la hora de ejercer nuestro derecho de elección.

Alfredo José Maranzana