| sábado, 12 de julio de 2003 | Por ahora los gremios no admiten responsabilidad Los dirigentes de la Comisión Intersindical intentaron esquivar ayer el golpe que les infligió la pericia de los Bomberos Zapadores donde se determinó que el incendio del edificio de los ex Tribunales fue a causa de las detonaciones de las bombas de estruendo. El dirigente local de la Unión del Personal Civil de la Nación (UPCN), Néstor Audero, responsabilizó directamente al gobernador Carlos Reutemann por el siniestro. Mientras que Juan Carlos Oliveira, de Luz y Fuerza, afirmó que no tiene ninguna información "oficial" de las conclusiones de las pericias. Por su parte, el secretario de la Asociación del Magisterio de Santa Fe (Amsafé), José María Tessa, puso en discusión que las bombas de estruendo fueran lanzadas desde la movilización. Para el referente de los municipales, Néstor Ferrazza, todavía hay que esperar el fallo judicial que determine responsabilidades concretas.
El martes de la semana pasada se realizó una importante movilización de los gremios estatales que culminó en la plaza San Martín, y momentos después las llamas devoraron casi la totalidad del Museo Angel Gallardo y gran parte del sector que ocupa la Facultad de Derecho, en el emblemático edificio de Santa Fe y Moreno.
"No sabemos nada, no tengo ninguna información hasta ahora de que gente de nuestro gremio esté comprometida en la investigación", aseveró una y otra vez Oliveira, casi al mismo tiempo que el juez Carbone informaba sobre la existencia de seis imputados, todos de Luz y Fuerza. El dirigente anunció que la Intersindical se reunirá en las próximas horas para debatir sobre el tema.
Audero no dudó en tirar la pelota afuera y disparó: "Si hay algún responsable es el gobernador (por Reutemann), ya que nunca habríamos hecho una marcha si hubiese atendido nuestros reclamos". Con molestia, el sindicalista insistió con que el voraz incendio "sólo opacó la gran movilización de los trabajadores. Fue un accidente fatal", remarcó.
Tessa, por su parte, aseguró que respeta el peritaje, aunque lo condicionó. "Las pericias no han determinado quién tiró esas bombas, yo creo que fue alguien por fuera de la organización de la marcha. Todo estuvo arreglado de antemano y nunca se acordó tirar bombas en esa esquina", aseveró el gremialista.
Ferrazza fue más cauto y recordó que los gremios se pusieron a disposición tanto del Rectorado como de las autoridades de Derecho y del museo para trabajar en la reconstrucción. "En ese sentido asumimos nuestra responsabilidad pero hay que esperar los fallos finales de las dos causas que están en curso", consignó. Así las cosas, la investigación sigue su cauce natural mientras los sindicalistas se aprestan para poder dar una respuesta. enviar nota por e-mail | | |