| miércoles, 09 de julio de 2003 | Sentencias para dos terribles casos de abuso sexual Condenan a un violador que fue descubierto por la víctima Ella volvió al barrio donde la atacaron para buscarlo, y lo encontró. A él lo sentenciaron a 10 años de prisión Jorge Salum / La Capital Tenía una tonada norteña y actuaba como el cabecilla. Fueron dos rasgos que Sabrina B. no olvidó de uno de los dos hombres que lo violaron en un barrio de la ciudad de Pérez. La chica reconoció esas señas particulares el día que volvió a cruzarse con él, cerca del sitio donde la atacaron, y también cuando lo enfrentó en una rueda de personas. Desde entonces pasaron tres años y ahora el violador fue condenado: lo sentenciaron a 10 años de prisión y el veredicto ya es inapelable.
El violador es Juan Carlos Galloso. Aunque un juez lo había condenado a 12 años de encierro al considerarlo autor de una violación casi idéntica a la de Sabrina B., un tribunal de segunda instancia redujo la pena porque consideró que no hay pruebas suficientes para atribuirle el segundo ataque y por esa razón lo absolvió.
Galloso actuó con un cómplice que ya había sido condenado en primera y segunda instancia a 10 años de prisión. Se trata de Fernando Plácido Martínez, de 36 años, quien también fue reconocido por la víctima como uno de sus agresores.
La chica iba en auto con el novio cuando el vehículo se descompuso, en el barrio Cabín 9 de Pérez. En ese instante se le acercaron tres hombres y los amenazaron con una escopeta. Los agresores actuaron con mucha violencia y sangre fría. A él lo encerraron en el baúl del auto y a ella la sometieron sexualmente. Después le robaron los zapatos y un llavero (un coyote con los colores del club River Plate), que más tarde la policía encontró en poder de los sospechosos.
La víctima hizo la denuncia y pronto entendió que sería difícil que la policía hallara a los autores. Por eso volvió al barrio y encaró una pesquisa propia. Habló con los vecinos, reunió datos y un día se cruzó con Galloso en la calle. En el acto supo que era el hombre de tonada norteña y modales de jefe que la había atacado junto a los otros dos sujetos, y avisó a la policía.
Después lo señaló con absoluta certeza en una rueda de personas. Lo mismo hizo con Martínez, que fue juzgado y condenado por el juez Ernesto Genesio. Galloso complicó un poco las cosas: escapó de la comisaría donde estaba detenido, más tarde fue herido en un tiroteo y volvió a caer entre rejas. En ese momento hizo un último intento por evitar un proceso por la violación de Sabrina B.: dio un nombre falso, aunque igual lo descubrieron, entre otros motivos porque guardaba recortes de La Capital con notas sobre él y con sus fotos.
Otro caso, pocas pruebas En febrero de este año, cuando lo condenó a 12 años de prisión, el juez Julio García lo responsabilizó por otra violación casi idéntica. Sin embargo, los camaristas Rubén Jukic, Guillermo Fierro y Antonio Paolicelli consideraron que si bien hay similitudes en cuanto al modo de operar y la zona de los ataques es la misma, en el segundo caso las pruebas contra Galloso soy muy débiles.
En este caso faltaba en requisito que se había cumplido puntualmente en el otro: la víctima dijo que el sospechoso se parecía al agresor, pero no se sintió segura y no aseguró que fuera él. Por eso, en lugar de los 12 años de prisión, reformularon el veredicto y lo dejaron en 10. enviar nota por e-mail | | Fotos | | Galloso, condenado a 10 años de prisión. | | |