Los nuevos dueños deberán mantener todo el personal durante 180 días

El gobierno pone en licitación a los bancos Suquía, Bersa y Bisel

La entidad mediterránea será la primera en salir a oferta pública. Las otras dos se escalonarán cada 15 días

El gobierno anunció ayer el lanzamiento de las licitaciones públicas para la venta de los nuevos bancos Suquía, Bersa y Bisel, que permanecen administrados por medio de un fideicomiso del Banco Nación desde que el francés Credit Agricole abandonó sus inversiones en la Argentina, en mayo de 2002. La operación estará abierta tanto para oferentes con participación o no en el sistema financiero y tiene como condición la absorción y mantenimiento por al menos 180 días de los trabajadores de cada entidad, que en conjunto suman 6.700. El primero en salir a oferta será el Suquía y luego seguirán Bersa y Bisel, en ese orden, escalonados cada quince días. Aunque las entidades salen sin precio base, se requerirán un "valor patrimonial de respaldo" de 50 millones de pesos para el Suquía y de 30 millones para los otros dos.

El anuncio fue efectuado en una conferencia que dieron ayer el ministro de Economía, Roberto Lavagna, el secretario de Finanzas, Guillermo Nielsen, y la presidenta del Banco Nación, Felisa Micelli. "Luego de superarse las trabas legales acabamos de decidir, luego de una reunión con el presidente (Néstor Kirchner) iniciar los procesos de licitación de los bancos", dijo el ministro de Economía, Roberto Lavagna.

El proceso de venta de los tres bancos se iniciará el jueves 10 de julio cuando se pongan a disposición de los interesados los pliegos de licitación, que serán uniformes para las tres instituciones.

Los bancos se venderán en forma separada y el primero en licitarse será el Banco del Suquía. Luego cada 15 días se iniciarán los procesos de las otras dos entidades.

Cada licitación demandará entre 90 y 100 días de trabajo hasta su adjudicación definitiva. A partir de esa fecha y ya en manos de los nuevos dueños, comenzarán a correr los 180 días en los cuales no podrán existir despidos de personal ni cierre de sucursales.

El proceso que está más armado para salir al ruedo es el del Banco Suquía, que preside el ex ministro de Hacienda provincial Hugo Garnero. Allegados al titular de la entidad mediterránea consignaron ayer que a mediados de julio, entre el 14 y el 17, se habilitará el data room con los interesados para ajustar los últimos detalles del pliego.

Entre el 20 y el 24 sería el período de entrega y apertura de los sobres y la idea es que el Suquía quede en manos de sus nuevos dueños para el mes de octubre.

En pos del banco existen varios interesados, algunos pertenecientes al sistema financiero y otros que vienen de afuera. Entre ellos se destacan el grupo Dinosaurio, liderado por el empresario cordobés Euclides Bugliotti, ex propietario de la cadena de supermercados Libertad y ahora volcado a la actividad constructora e inmobiliaria. También están los Roggio, la familia que le dio vida al Suquía hasta que se vendió a los franceses. Y entre los bancos que serían potenciales oferentes figuran el Hipotecario, Comafi, Banex y el de Miami.

El banco Credit Agricole, de capitales franceses, decidió dejar de operar estos tres bancos el 21 de mayo del año pasado. Tras algunos días de incertidumbre, reabrieron sus puertas en manos del Nación. "Creo que hoy el Credit no se iría del país", comentó Lavagna, quien sin embargo destacó que esta salida "obedeció no sólo a la crisis argentina sino que, además, ellos están en otra estrategia de negocios".

Aclaró además que "se privilegiará aquellas que no demanden ayuda del Banco Central o del Fondo Fiduciario" creado en su momento para atender la situación de los bancos en crisis.

La situación financiera de estas tres entidades "no es ni más ni menos que el promedio del sistema financiero", acotó Micelli, al tiempo que sostuvo que "los balances de los bancos están en situación promedio con el sistema" y el mecanismo de licitación será el de doble sobre.

Subrayó que además de la oferta económica será fundamental el plan de expansión que presenten los interesados, el cual al menos deberá tener un horizonte de cinco años, en el que se incluya el compromiso de no cerrar sucursales o despedir empleados.

Los interesados en el Banco del Suquía deberán acreditar un patrimonio de al menos 50 millones de pesos, mientras que para los otros dos bancos esa presentación es por 30 millones de pesos, individualmente. Las licitaciones salen sin precio base y un mismo oferente podría quedarse con los tres bancos.

“Hoy el Credit Agricole no se iría del país".