| miércoles, 02 de julio de 2003 | Corte: la nominación de Zaffaroni cosecha elogios Buenos Aires.- Las primeras reacciones ampliamente a favor de la designación de Raúl Eugenio Zaffaroni como candidato del gobierno a ocupar el lugar dejado por Julio Nazareno en la Corte Suprema, auguraría que el prestigioso abogado penalista podría acceder a un lugar en el máximo tribunal de justicia del país.
Por decreto del presidente Néstor Kirchner por el que autolimitó sus funciones en la designación de los miembros de la Corte, a partir de hoy habría un plazo de sesenta días para que se publique su designación y se someta a la opinión pública, antes de ser propuesto formalmente al Senado para que le otorgue el acuerdo.
El juez Nazareno renunció el viernes, acosado por el proceso de juicio político abierto en Diputados, que había acumulado 22 acusaciones en su contra; por las presiones oficiales, y por la soledad en que se encontraba en relación a sus pares de la Corte.
El decreto por el cual se aceptó esa dimisión fue publicado hoy, entonces correren ya los 30 días de lapso máximo para que el nombre de Zaffaroni sea publicado y las ong y asociaciones civiles y profesionales opinen sobre esa propuesta.
Zaffaroni, de 63 años, ex miembro del Frepaso, con 21 años de experiencia en la Justicia, en sus primeras expresiones públicas tras su nominación, dijo sentirse "sorprendido" pero al mismo tiempo "complacido" por la designación.
El ex juez se hizo famoso por haber sido quien redactó el polémico Código de Convivencia Urbana -cuestionada, entre otros, por el hoy ministro de Justicia, Gustavo Beliz, cuando peleaba por la jefatura de Gobierno-, que lo convirtió en referente de lo que se dio en llamar el "garantismo", opuesto a quienes propician "mano dura" en materia de criminalización penal.
Hoy el magistrado aclaró que "no existe un derecho penal garantista y otro no garantista, sino un derecho penal políticamente liberal y otro autoritario", al que alguna vez también llamó "patibulario".
Con su designación, el gobierno dio un paso adelante en su promesa de no contar con una Corte adicta, al estilo de la que primó durante la década menemista, y esto mismo se encargó de remarcarlo el propio Zaffaroni.
"Lo que me ha manifestado el presidente es que no quiere una Corte adicta, sino una Corte de juristas; le pregunté muy sinceramente si había algún condicionamiento: me dijo que no, en absoluto, y no me quedó otra que agradecerle la confianza", comentó, para agregar que "no tengo otra forma de manejarme" en forma independiente y que "si me faltara independencia, me voy".
Por otra parte, en el pasado de Zaffaroni figura una polémica con Kirchner, a quien criticó duramente cuando éste, en su época de gobernador santacruceño, realizó una reforma que, según sus opositores, le permitió contar con "una justicia de amigos".
El jefe de Gabinete, Alberto Fernández, aclaró que el jefe del Estado no eligió al penalista por "amistad", sino por "su calidad intelectual".
"Las vacantes en la Corte no es propósito del presidente kirchner cubrirlas con amigos, sino simpolemente cubrirlas con los mejores jueces", subrayó el funcionario. (DYN) enviar nota por e-mail | | |