| domingo, 29 de junio de 2003 | Llegó el tiempo del desahogo esperado Los hinchas canallas acompañaron como siempre y al final celebraron la conclusión de esa sensación de nerviosismos y tensión que tuvieron a lo largo de dos torneos. El alivio se convirtió en desahogo y el desahogo en euforia, por eso ratificaron una vez más ese amor propio por ser canalla y repartieron flores a diestra y siniestra. Tal es así que, por primera vez desde su regreso, en los últimos minutos del partido la barra auriazul le tributó un reconocimiento al técnico Miguel Angel Russo. "Que ahora vamos a salir campeón con el equipo de Miguel". Y cuando la Coneja Baldasssi pitó el final se escuchó un coro uniforme que manifestó el "Russo, Russo...".
También fue emotivo el abrazo que se dio Lucho Figueroa con Jorge, su padre, quienes luego de trepar al alambrado se encontraron en lo alto, y el goleador canalla le regaló su camiseta a su padre.
También el profe Guillermo Cinquetti se relajó y se permitió mostrar lo que sentía al confundirse con Russo y Gottardi en una celebración poco inusual para el cuerpo técnico, a sabiendas de que los intregrantes de la conducción del plantel no son partidarios de exhibir sus sensaciones.
Los canallas en Banfield y en Rosario sonrieron y festejaron. Por lo que cantaron, ahora piensan en Boca y prometen copar el Gigante para allí en el último cotejo unirse en la celebración del pasaporte a una o dos copas internacionales. enviar nota por e-mail | | |