Una muerte que causó dolor e impotencia

La muerte del jugador camerunés Marc Vivien Foe causó congoja entre los integrantes del plantel canalla. Como así indignación, la determinación de continuar jugando el partido y el torneo de la Confederación. "El fútbol debe continuar", dijo el presidente de la Fifa, Joseph Blatter, luego de que la selección africana había puesto en duda su participación en la final. Al ser consultado sobre el hecho y la decisión del máximo organismo del fútbol mundial, Daniel Quinteros respondió con pesar: "Fue algo terrible ver las imágenes del jugador en la cancha, pero mucho más doloroso fue la decisión de la Fifa, porque en este tipo de casos fatales me parece que los otros intereses deben pasar a segundo plano. Estamos hablando de la muerte de un futbolista en pleno partido, me parece que ante esto todo lo demás ya no tiene importancia".

Horacio Carbonari también admitió que le causó impresión ver al jugador africano tendido sin vida en la cancha. "Pero viejo, cómo van a seguir jugando como si nada, un compañero se murió en la cancha. Es una barbaridad. Yo no podría haber continuado en el campo de juego si me entero que mi compañero se murió en el acto".

El técnico Miguel Russo coincidió con sus dirigidos y sentenció que "cuando sucede un accidente de este tipo el fútbol debe esperar, porque se trata de la muerte de un compañero de trabajo. No da todo lo mismo. Además este pobre muchacho murió ahí, en ese momento, por lo tanto no es que vos seguís jugando esperando que lo que sufrió no sea nada grave, se murió delante de todos. Sin dudas que el partido y el torneo podían esperar. Ante una muerte a quién carajo le importa seguir jugando, porque vos te querés ir de la cancha en ese momento".