Vecinos del barrio Correo de Granadero Baigorria se quejaron por la falta de respuesta de la policía frente a los asaltos que a diario se producen en ese sector ubicado en la zona sur de la ciudad y que se encuentra a escasa distancia del límite con Rosario. La voz cantante de ese reclamo es Eduardo Zorrilla, propietario del autoservicio ubicado en Viamonte al 100. El comerciante sufrió cinco robos a mano armada en dos años y en todos esos episodios la policía tardó de 20 a 25 minutos en llegar al sitio donde se produjo el delito.
"En todo momento las autoridades policiales dicen que hacen todo lo posible para solucionar el tema de inseguridad, pero lo cierto es que nunca llegan a tiempo. No quiero pensar mal. Por eso creo que la policía tiene miedo. Calculo que por el bajo salario que perciben, no quieren enfrentarse a ladrones con armas pesadas y entonces prefieren dejarlos ir", reflexionó Zorrilla, dueño de un par de autoservicios en Baigorria y en Rosario, que en toda su carrera comercial sufrió 18 robos.
El colmo de esa situación se produjo cuando tres ladrones asaltaron su negocio de Baigorria y huyeron en bicicleta. La policía tardó más de 30 minutos y eso permitió que los asaltantes huyeran a pesar de que uno de los rodados se rompió y en plena fuga dejó a pie a uno de los maleantes. "Dos siguieron en bicicleta, pero uno se escapó a pie lo más tranquilo", disparó el comerciante.
Sin solución
"Los robos en esta zona son moneda corriente. No sólo sufrimos un perjuicio económico sino que también los clientes corren peligro porque muchas veces entran con armas largas", remarcó Zorrilla. En ese sentido, el comerciante recordó que en el último robo que sufrió, la semana pasada, uno de los hampones esgrimía una escopeta Itaka.
Otro episodio violento que sufrió en su local fue cuando una gavilla irrumpió en el lugar y llevó a empleados y clientes hacia la parte trasera. "Quisieron llevarse el dinero de la caja registradora, pero como no pudieron abrirla, se tomaron el tiempo de desconectarla pacientemente y se la llevaron. Toda la secuencia duró casi 10 minutos. Un vecino que vio lo que pasaba, llamó a la policía, pero como siempre llegaron tarde, cuando los ladrones se fugaron con la máquina a cuestas".
Para el comerciante es inconcebible que el Comando Radioeléctrico y la seccional 24ª, de Granadero Baigorria,a no puedan acudir en pocos minutos a una emergencia. "En auto uno puede cruzar la ciudad de norte a sur en pocos minutos, y ellos no llegan a detener, ni siquiera a perseguir, a un par de delincuentes", manifestó, a lo que agregó: "Este barrio está encajonado y tiene tres salidas. Hacia la ruta 11, el camino que conduce al cementerio y hacia una calle que sale a Circunvalación. Una de esas salidas está a tres cuadras de la seccional. Si reciben una llamada de alarma, y se sincronizaran los esfuerzos, podrían atajar a los ladrones fácilmente, taponándoles la fuga por esas calles", argumentó.
"No estoy en contra de la policía y quiero creer que actúa de buena fe. Por eso pienso que los agentes tienen miedo. Son jóvenes que por un sueldo bajo no arriesgan la vida, pero entonces que se dediquen a ser barrenderos", apuntó Zorrilla, cansado por la falta de respuesta a sus reclamos.