Año CXXXVI
 Nº 49.859
Rosario,
domingo  01 de
junio de 2003
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Miami: Castillo de coral
Lo comparan con las pirámides de Egipto, pero es la obra de un hombre entristecido por una pena de amor

Victoria Oviedo

Todo comenzó con la depresión de Edward Leedskalnin, un lituano que abandonado por su prometida un día antes de la boda decidió levantar en su honor un monumento de coral (Coral Castle), en la ciudad de Miami. A este pequeño hombre -medía 1,52 metros y pesaba unos 45 kilos- le llevó 28 años construir el testimonio de su amor por Agnes Scuffs, una hermosa joven diez años menor que él y a la que se refería como sus "dulces 16". Ed y Agnes estaban comprometidos para casarse en Lituania, pero un día antes de la boda, la joven le anunció que no quería hacerlo porque era demasiado pobre y viejo para ella.
Con el corazón destrozado y sumido en una profunda tristeza, Ed deambuló varios años por Canadá, California y Texas, trabajando en madereras, tarea que lo preparó para lo que enfrentaría más tarde: cortar y trasladar bloques de coral de varias toneladas y sin más ayuda que sus herramientas manuales.
Cuenta la leyenda que Ed, nacido en 1887 en Riga, Lituania, llegó al sur del estado de Florida entre 1918 y 1920, atraído por el buen clima. Compró un acre, 0,405 hectáreas, en Florida City, por 12 dólares, y allí comenzó a tallar el castillo para Agnes, aprovechando que esta zona está formada sobre bloques de coral. Más tarde se mudó al municipio de Homestead, al sur de la ciudad de Miami, donde compró más hectáreas de tierra y pasó tres años trasladando desde Florida City, que distaba a unos 16 kilómetros, las estructuras de Coral Castle en el chasis de un viejo camión.
Aún hoy nadie sabe cómo hizo Ed para cortar y trasladar los bloques de coral sin ninguna ayuda, y tampoco nadie lo vio cargando y descargando las tallas porque lo hacía de noche bajo la luz de un farol.
Cuando alguien le preguntaba cómo pudo transportar el solo los bloques de coral, explicaba que "comprendía muy bien las leyes físicas de carga y levantamiento". Y eso que solo había cursado hasta el cuarto grado de la escuela primaria.
Así nació Coral Castle -originariamente se llamó Rock Gate Park-, ubicado en 28655 South Dixie Highway, donde cruza la autopista US 1, en el municipio de Homestead, y que después de la muerte de Ed en 1951, convoca a miles de turistas de todo el mundo.
Las paredes y portones de Coral Castle dan cuenta de la audaz y misteriosa personalidad de Ed, talladas con suma precisión y dedicación. Todo el mobiliario del castillo, que no tiene techo, se conserva intacto.
Pero el mayor logro de Ed es un portón de 9 toneladas y dos metros de alto, que puede moverse con solo empujarlo con un dedo.
Otra realización asombrosa es El Pozo, excavado por Ed y que le proveía de agua fresca porque no contaba con agua de cañerías. Además lo utilizaba para guardar comida dentro de pomos sellados porque tampoco tenía electricidad.
Para bañarse, este pequeño hombre construyó una bañera de su mismo tamaño y longitud, que llenaba por la mañana con el agua fresca del pozo, y que a media tarde ya se había calentado lo suficiente bajo el sol para tomar un baño.
Completan el cuarto de baño un lavamanos y un espejo hecho con un trozo de exquisito cubierto de agua, con el cual se veía "perfectamente" para afeitarse y peinarse, según cuenta Ray, el guía cubano de Coral Castle.
Como todo castillo, también hay un trono de casi 300 kilogramos, lo bastante cómodo para que cualquier visitante se siente y se tome fotografías. Por detrás, están los tronos para su amada Agnes, un niño y su suegra.
Para los románticos está la Mesa para Festín de Enamorados, con forma de corazón, y que hoy se ofrece para celebrar bodas el Día de San Valentín. Al lado sembró una planta de flores llamada Ixora que todavía está en el mismo lugar.
Ed se llevó a la tumba el método de la construcción de Coral Castle. Su obra ha sido comparada por científicos con el secreto de las pirámides de Egipto y el Taj Mahal, en la India, que un rey le dedicó a su esposa.
Coral Castle está abierto todos los días del año, de 7 a 21, y el costo de la entrada para adultos es de 9,75 dólares, niños de 7 a 12 años pagan 5 dólares, y los menores de 6 años entran gratis.



El Coral Castle fue comparado con el Taj Mahal.
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