El director técnico de Boca Juniors, Carlos Bianchi, consideró ayer que "a River hay que respetarlo en todo sentido" y negó que el conjunto xeneize sea "el favorito" para ganar el superclásico del fútbol argentino que se jugará mañana en la Bombonera.
"En este tipo de enfrentamientos no tienen nada que ver los antecedentes, y el hecho de que nosotros nos hayamos clasificado para la ronda siguiente de la Copa y ellos no. En los clásicos todos los partidos son diferentes", expresó Bianchi.
Durante una conferencia de prensa que brindó en el complejo de Casa Amarilla, tras el entrenamiento matinal del conjunto auriazul, el entrenador consideró que el enfrentamiento con el más acérrimo rival constituye "siempre una historia diferente".
"En los clásicos no importa cómo llegan los equipos. Boca esta primero, River segundo y junto con Vélez nos estamos jugando el campeonato", expresó.
Reiteró que en este tipo de enfrentamientos "de nada cuentan los antecedentes", ya que son partidos "especiales".
Bianchi lamentó posteriormente que Boca haya estado "tapando agujeros" en el equipo durante casi todo el campeonato debido a la ola de lesionados que tiene el plantel.
En ese sentido, confirmó que descartó para mañana al volante Sebastián Battaglia y al defensor Nicolás Burdisso, porque padecen sendas lesiones en los isquiotibiales.
También decidió darle "un descanso" al volante santafecino Matías Donnet porque tiene "fatiga en ambos isquiotibiales".
Tras considerar que "River es un rival que hay que respetar en todo sentido", Bianchi se negó a hablar del futuro de su colega Manuel Pellegrini si es que pierde mañana.
"De eso yo no opino", fue la respuesta cuando se lo consultó y reflexionó que una vez, cuando Boca perdió dos partidos seguidos, también estuvo en la misma situación por la que atraviesa el técnico chileno.
"Fue cuando perdimos con Paysandú y Vélez, que criticaban el sistema de juego de Boca", finalizó el Virrey a modo de queja. (Télam)
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La Ciudad
