Un especialista en Educación

Marcela Isaías / La Capital

La designación de Daniel Filmus al frente de la cartera educativa puede interpretarse como una buena señal del presidente electo Néstor Kirchner hacia los maestros. Los docentes le reconocen que es un especialista en el tema para el que fue designado. Este sociólogo, egresado de la UBA, se ha manifestado siempre a favor del profesionalismo de los educadores.
Filmus corre con otra ventaja a los ojos del sector, proviene del área, cosa que no sucede con muchos de los ministros provinciales, mayormente identificados por cumplir funciones administrativas e identificarse con "que los números cierren". Hasta que Kirchner lo designó, el actual secretario de Educación porteña acompañaba a Aníbal Ibarra como vice en la fórmula para la reelección de la jefatura de Gobierno.
Más allá de las buenas ideas, Filmus deberá devolver a Educación la función de planificar, evaluar y desarrollar una política educativa. Cosa que desde hace mucho tiempo no ocurre. Quizás la batalla donde el flamante ministro deberá dejar ver su lucidez académica será en garantizar un mínimo de equidad y calidad educativa para todos los alumnos del territorio nacional.
Hace unos días, la ministra de Educación y Culturas del Ecuador, Rosa María Torres -reconocida pedagoga e investigadora- había manifestado ante una visita del Fondo Monetario Internacional (FMI) a su país, que "se ha instalado en los últimos años una lógica según la cual son los economistas y, en particular el Ministerio de Economía, los que toman decisiones sobre el conjunto del presupuesto e incluso sobre la política educativa, sin saber de educación ni respetar la especificidad de este campo". Lo hacía resaltando la oportunidad que había tenido de poder plantear las prioridades de su país ante las recetas internacionales.
Está claro que esta lógica también se da en la Argentina, desde la más temprana formación hasta el destino del magro presupuesto universitario. Claro que, para que esta lógica se rompa, dependerá tanto de la determinación del nuevo ministro como del apoyo del presidente electo.
No todos los desafíos en Educación terminan aquí. La ciudad de Buenos Aires fue la única jurisdicción que nunca implementó la ley federal de educación, que cumplió 10 años de su sanción. Es decir las escuelas siguen dividiéndose en esta ciudad entre primarias y secundarias, mientras que el resto del país llevó adelante la reforma. El debate por este destino no será fácil, se dará en el marco de provincias empobrecidas, sin financiamiento ni la infraestructura adecuada, sin planes de formación docente y una significativa precariedad en los salarios de los educadores.