Javier Parenti / La Capital
Faltaban cinco minutos y los rojinegros perdían 1 a 0 ante los salaítos. El Bambino había llamado al Loco Sacripanti para tener más presencia ofensiva con tres hombres de punta, dejando la misma cantidad de jugadores atrás, y Marini había hecho siete cambios. Y cuando parecía que el empate no llegaría, la red se sacudió dos veces con los goles de Saucedo y Kmet. Injusto. El empate hubiera estado bien.
Es que Argentino tuvo mejores minutos de fútbol que el equipo alternativo rojinegro. Le jugó de igual a igual, manejó mejor la pelota y cuando sacó ventaja, en una jugada confusa tras un córner, la supo cuidar. Pero los cambios modificaron todo. Los salaítos disminuyeron y los rojinegros levantaron su nivel y esa fue la clave.
Había empezado mejor Newell's pero en cinco minutos el trámite se emparejó. Eso sí, las jugadas de gol fueron escasas. Porque Argentino tenía la pelota y llegaba bien armado hasta el área rival, donde penó por su falta de resolución, esa que no lo dejó sumar más puntos en el torneo de la B -salvo en el último partido ante Ferro-, mientras que los rojinegros no encontraban los caminos porque ni Torres ni Martínez conseguían progresar en firme con la pelota, Lagorio no pesaba y Paulo Rosales bajaba demasiado, perdiendo profundidad.
El Bambino le pedía a su mediocampo que se parara mejor. A Fondato que abanique, a Martínez que tenga ida y vuelta, que en conjunto achiquen los espacios y que probaran al arco.
Pero siempre ganaban los defensores salaítos (el mejor era Bassani) y en el medio Villarreal prevalecía e Iriarte complicaba trepando por izquierda. Los que no aparecieron fueron Vázquez y García.
Y recién sobre el final de la primera mitad hubo olor a gol. Estuvo más cerca Newell's de desnivelar. Pero se lució Campestrini con una doble tapada brillante ante remates de Elvio Martínez y Lagorio.
En la segunda parte Argentino siguió controlando las acciones pero adoleciendo de final. Aunque a los 15' encontró el gol en un córner que Villarreal peleó en el segundo palo.
Con el adelantamiento de Elvio Martínez a la posición de enganche (arrancó como carrilero por derecha) haciendo un enroque con el Coqui Torres la lepra ganó en llegada. Pero recién en los últimos cinco minutos Newell's dominó y llegó al triunfo.
Primero empató cuando el Loco Sacripanti exigió a una gran tapada de Andrada que le quedó a Saucedo para convertir. Y dos minutos después Julián Kmet definió con calidad sobre la cabeza del arquero. Era el 2 a 1, el gol que le dio un premio exagerado a la lepra.
¿Cómo formó el ganador? Lo hizo con Pocrnjic; Ré (30' Ruiz), Martorell, Bartolini (50' Sacripanti) y Adinolfi; E. Martínez, Fondato, Kmet y Torres; Paulo Rosales y Lagorio (30' Saucedo).
¿Y Argentino? Con Campestrini (30' Andrada); Sciretta (52' Damiano); Aceto y Bassani; Raschetti (51' Luzzi), Rubio (39' Sandoval), Villarreal e Iriarte; Chacón (30' Genesio) (46' Ocampo); García (51' Giusti) y Vázquez (51' Amaya).
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La Ciudad
