Fernando Toloza / Escenario
Fabián Vena no quería volver a la televisión de cualquier forma. Por eso esperó cuatro años hasta encontrar una propuesta que lo convenciese y le propusiese riesgo, como lo fue, según aseguró, el unitario "Verdad consecuencia". El proyecto que lo sedujo fue "Resistiré", una telenovela que el actor no dudó en comparar con las grandes creaciones de Alberto Migré. Lo decisivo para sumarse al envío fue la calidad y el vértigo: "Necesitó siempre un personaje de vértigo, eso sería lo ideal para poder trabajar en televisión. Siento que cuando hago un personaje diferente me relajo", contó el actor, quien además del programa estrenará en los próximos días la obra de teatro "Las variaciones Goldberg", de George Tabori, junto a Alfredo Alcón.
-¿Por qué tardaste tantos años en volver a la televisión en forma sostenida, después del éxito de "Verdad consecuencia"?
-Hubo una serie de motivos, pero entre todos ellas la razón principal fue descansar de "Verdad consecuencia", y justo con eso coincidió que la televisión empezó a decaer en su calidad. Me gusta barajar y dar de nuevo, y en función de eso profundice en el teatro, que siempre es mi guarida.
-¿Pero hubo propuestas de trabajo?
-Sí, pero fue un retiro estratégico y las propuestas que surgieron no me parecieron potables, es decir algo que tuviese el mismo riesgo y compromiso que implicaba "Verdad consecuencia".
-¿Ese programa es tu medida para definir la calidad de las propuestas?
-Para todo lo que aconteció en esos años sí. Además mucho de lo que me ofrecieron tenía que ver con aquello. De hecho las conversaciones con Claudio Villarruel empezaron el año siguiente de que terminó "Verdad consecuencia", pero recién ahora surgió una posibilidad tan importante.
-¿Te costó entonces despedirte del personaje de Leonardo Predás?
-Cuatro años, imaginate, porque creo que ahí está la base de todo. Si uno actúa en televisión, con continuidad, tiene la chance de arriesgarse con algo nuevo. Aunque eso no siempre se da, porque a veces para no perder el ritmo de la tele se hacen cosas que no tienen el mismo riesgo. Lo ideal sería que cada vez sea un vértigo distinto. Si hubiese hecho algo al toque de "Verdad consecuencia" seguramente habría aparecido muchísimo de esa actuación. Necesitaba un personaje con vértigo. Naturalmente se ha desarrollado un tiempo por el cual yo pude despojarme de todo Leonardo Predás, e incluso de esa característica de genes italianos que tenía, los cuales yo comparto.
-¿Qué te sedujo del personaje de Mauricio que interpretás en "Resistiré"?
-Por sobre todas las cosas es un personaje que no creo que exista en el planeta (risas). Es un personaje totalmente a construir. Tanto Villarruel como Pablo Echarri me aclararon que Mauricio era clave en el proyecto y me dieron un lugar importante. Eso me dio la posibilidad de abrirme al riesgo de hacer un culebrón, un género que nunca había hecho, más allá de las situaciones de culebrón que puede llegar a tener un unitario. Sentí que compartía con la gente de la telenovela la responsabilidad de crear un papel diferente. Eso me relajó mucho.
-¿Qué fue lo primero que supiste del personaje, más allá de su importancia?
-Lo de su negocio. Cuando Belati y Segado, que son los autores, le encontraron la línea al personaje lo relacionaron con la producción de comida orgánica, una manera de ver la vida que después se pasa al otro extremo, al de su cosa macabra.
-¿Sabía lo que está pasando entre Julia y Diego, o el personaje se construyó sobre esa duda?
-Filmar una telenovela es muy interesante porque en el mismo día grabás cuatro o cinco escenas de distintos capítulos. Por más que todo el mundo sepa la continuidad, lo que vos tenés que aprender es a trabajar como si esa toma fuese lo que único que aconteciera de principio a final, sin saber que viene después. Creo que en eso es lo mismo que para el cine. Lo que funciona para mí es el ahora, esa escena.
-¿La enfermedad que padece busca hacerlo más lúgubre o apunta a otra cosa?
-El ya de por sí es raro, todo lo que acontece alrededor de él tiene esa característica de lo que acontece alrededor de este personaje, la gente que lo rodea, los lugares peligrosos los negocios raros. Esa enfermedad no es algo íntimamente relacionado con su negocio pero es algo que lo humaniza. Todos los personajes de la telenovela van mostrando sus contradicciones y problemas, así como aparece su impronta por el naturismo y su lado perverso, tal vez para humanizarlo tenga que existir una fuerza tan poderosa como la de esa enfermedad. Se trata de buscarles una lógica a los personajes y no que sean apenas una machietta, es intentar que se parezcan a los de las telenovelas que yo miraba.
-¿Qué telenovelas veías y que gustaba del género?
-"Rolando Rivas","Piel naranja", Alberto Migré. Me acuerdo de la calidad de los textos.
-Tu personaje tiene diálogos jugosos. Por ejemplo cuando dice "vivimos en un país violento con mucha gente insatisfecha". ¿Coincidís con esa visión?
-Los autores definen la línea de cada personaje y lo importante de esa frase lo marca el tono con que lo dijo Mauricio. Más allá del tono es una frase para pensar, porque el país está en un estado de violencia por muchas razones, entre otro por los que gobiernan. Tuve la suerte de recorrer el país con giras de teatro y ver la gente buena que tenemos, con ganas de trabajar y que no merece semejante dirigencia como la que tenemos. Con la calidad de gente que tenemos parece imposible tener un país tan castigado con los políticos actuales, locos de poder y ambición, y que ni siquiera hacen su trabajo. Yo no me hago cargo de esos que dicen que nos merecemos los dirigentes que tenemos, porque la gente poco tiene que ver con la clase política. Lo bueno sería encontrar una manera nueva de acceder a las decisiones.
-En "Resistiré" perdés a tu novia. Lo mismo le pasaba a tu personaje en la película "Déjala correr", donde la chica lo dejaba plantado. ¿Te divierte ese papel de perdedor?
-Es interesante la relación pero hay una gran diferencia porque el personaje de "Déjala correr" era llevar a un extremo lo que tenía de Leonardo Predás, pero un contexto de comedia. En cambio, en Mauricio hay un juego más siniestro, y creo que reacciona de otra manera.
-¿Por qué las telenovelas siguen enganchando al público?
-En general creo que por la calidad de ideas y actuaciones que suelen aparecer en las telenovelas. En el caso de "Resistiré" pasa eso y también tenés el peso de un elenco increíble, donde por momentos podés sentir que son muchas telenovelas dentro de una sola. A eso hay que sumarle la dedicación de la gente de los rubros técnicos, que son tipos que se comprometen y están ahí más que por el hecho de ganar un sueldo.
-¿Tenés algún proyecto de trabajo con Inés Estévez o pensás que eso expone demasiado tu relación con ella?
-No siento que no afecte en lo privado. De hecho hemos trabajado en "Verdad consecuencia", en una obra de teatro y en un capítulo de "Tiempo final". Si no hemos trabajado más juntos es porque no se ha dado. Siento que nos beneficia trabajar juntos, porque nos conocemos mucho y eso nos ayuda a actuar mejor, a aprovecharnos. Somos colegas que nos respetamos y nos alegramos por los éxitos del otro.
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