cartas

Rosario sólo es un barrio residencial

La ciudad de Rosario de Santa Fe al terminar el siglo 19 era una de las ciudades con más desarrollo industrial en nuestro país. Algunas de sus grandes industrias fueron sin duda y con peligro de olvidarme de alguna, las siguientes: había una gran fundición de bronce y cobre y otros metales que producían en especial griferías. Le seguían en orden los grandes talleres ferroviarios donde se reparaba desde una locomotora a una zorra de mano. No se quedaban atrás dos manufacturas de cigarros y cigarrillos. Dos grandes molinos harineros, muchas fábricas de fideos, una de conservas envasadas, también eran muy importantes las fábricas de ladrillos cerámicos y una gran fábrica de velas de cera. Otra fue la refinería de azúcar. Podemos agregar dos importantes mueblerías, innumerables fábricas de bolsas de arpillera para cereales, algunas de productos químicos, fábrica de jabón y molinos yerbateros. Hoy no queda casi nada. Las industrias más importantes se fueron a los alrededores, como los frigoríficos. Rosario es hoy sólo un barrio residencial que todavía subsiste a pesar de que los gobernadores han sido de otras ciudades y que solo por la inteligencia y el patriotismo de algunos intendentes como Luis Lamas, Miguel Culaciatti y el inolvidable Cándido Carballo, el resto casi sin muchas exclusiones, apenas pueden llevar el nombre de los que se presentan el 29 para cobrar los sueldos.
Claudia Rodríguez