Año CXXXVI
 Nº 49.823
Rosario,
viernes  25 de
abril de 2003
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Piden que se cumpla con la ordenanza que fija las condiciones de los pet shops
Proteccionistas denuncian maltrato en la venta de mascotas
En distintas inspecciones encontraron animales "hacinados, sin agua ni comida, y hasta dopados"

"La mayoría de los lugares donde se venden mascotas no respetan las condiciones mínimas para alojar a los animales. Y, en muchos casos, hasta se los somete a maltratos". La denuncia, formulada ayer por dos asociaciones proteccionistas de animales de Rosario, tiene su sustento. Desde hace tiempo, ambas entidades realizan inspecciones regulares en estos comercios y los resultados no son nada halagüeños: "En muchos casos encontramos animales en estado lamentable, hacinados, sin agua ni comida, sin un veterinario responsable del lugar, y hasta hallamos cachorros dopados", enumeró la responsable de la Fundación de Defensa Ecológica Albert Schweitzer, Nelly Recla, a la par que reclamó al municipio mayor control sobre los locales de este rubro.
Desde la Dirección de Registración e Inspección de la Municipalidad no pudieron precisar cuántos comercios de venta de mascotas habilitados existen en Rosario. Sin embargo, en la guía telefónica figuran más de una decena de pet shops. "Y prácticamente todos están en infracción", advirtió Hilda Moreno desde el Club de Animales Felices (CAF).
Y esta apreciación no es subjetiva. Desde el año 94 rige en Rosario la ordenanza Nº5.783, que especifica los requisitos que deben cumplir los comercios donde se venden mascotas. "Lo que pasa es que nadie los controla. No lo hace la Municipalidad al momento de su habilitación, ni tampoco durante su funcionamiento", consideró Moreno.
Así, entre las condiciones que establece la norma y la realidad de estos comercios "hay un abismo", indicaron los proteccionistas. Y no fueron lerdos para recordar las situaciones que encontraron en las inspecciones que realizaron.
"Constantemente estamos recibiendo denuncias de este tipo porque los vecinos ven que los animales están solos, llorando y no tienen alimentos", aseguró Recla e inmediatamente recordó "el comercio de Córdoba y Wilde donde los perros están completamente hacinados", u otros locales céntricos como el de San Lorenzo al 1300, o el de Paraguay al 900 que "ponen cachorros en la vidriera y no les dejan agua y comida".
Aunque están a la vista de todos, la situación de los pet shops instalados en los supermercados (tanto en el Libertad como en el Norte) no es mucho mejor. "Frecuentemente hay más de dos animales por jaula y están exhibidos fuera de los comercios, donde quedan expuestos a las manos de todos", sumó Moreno.
En otros casos, como en el comercio del primer piso del Shopping del Siglo, "a las mascotas les falta ventilación, no ven la luz del día y quedan abandonados allí toda la noche e, incluso, pasan los fines de semana encerrados allí", agregó.

Al pie de la norma
Entre otros puntos, la ordenanza 5.783 estipula claramente que los animales deberán estar en lugares limpios y aireados, con alimentos y agua de bebida "en forma permanente", y que en ningún caso se permitirá colocar "más de seis aves o dos mamíferos por jaula" que deberán estar bajo el control de un médico veterinario.
Además, se establece que el rubro de tenencia, exhibición y venta de animales estará "perfectamente separado" del sector de venta de productos de uso en medicina veterinaria y alimentos balanceados. Y, salvo los peces, "no se podrá exhibir ningún animal en recipientes de vidrio, como tampoco en la vía pública, ni en lugares donde no estén al reparo de las inclemencias del tiempo".
Finalmente se indica que los caniles deberán tener una altura equivalente al doble del largo del animal, por lo cual parados en dos patas los bichos no podrán tocar nunca el techo de la jaula. Y el piso de los alojamientos deberá estar conectado a la red cloacal, previa neutralización bacteriológica para evitar problemas sanitarios.

Del dicho al hecho
"Nos costó mucho que el Concejo Municipal apruebe esta ordenanza. Y ahora tenemos que seguir trabajando para que finalmente la norma se cumpla", consideró Moreno. A la par que advirtió las consecuencias que tiene someter al animal a estas condiciones. "En principio, los cachorros se estresan muchísimo y, en otros casos, hasta se podría equiparar a situaciones de maltrato".
Recla fue aún más allá: "Muchas veces encontramos cachorros dopados que duermen las 24 horas, porque es la única forma de mantener quieto a un animal que, a corta edad, es absolutamente activo. Y ni me quiero imaginar el destino que tienen estos animales si no encuentran quién los compre", deslizó.
La venta de animales silvestres, como las iguanas muy en boga en estos días, es otro tema. "Sólo pueden hacerlo si provienen de criaderos autorizados. Y esto rara vez se cumple", advirtió Recla.
En algunos casos, los proteccionistas llevaron las denuncias hasta la policía y la Justicia, otras veces optaron por "escrachar" a los profesionales que están al frente de estos comercios. Sin embargo, saben que su poder de acción es limitado.
"La Municipalidad es quien tiene el poder de controlar y sancionar a los comercios que no cumplen la ordenanza", recalcaron. Y en este tema la norma fija multas de 750 a 5.000 pesos, decomiso y hasta clausuras de 90 días a quienes no cumplan con estas disposiciones. Al mismo tiempo, extiende la responsabilidad al profesional a cargo del establecimiento.



Los negocios pueden recibir multas de 750 a 5 mil pesos. (Foto: Enrique Rodríguez)
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