La falta de descanso de los conductores y el sueño podrían ser la causa principal del trágico accidente del ómnibus de la empresa Cata. Así lo consideró Marcelo Sansiovich, jefe del Cuerpo Activo de Bomberos de Rufino, quien con sus hombres estuvo desde temprano en el lugar del hecho auxiliando a los heridos.
Entrevistado por la emisora Radio 2, Sansiovich corroboró la versión de que los choferes venían manejando desde Mendoza "y hacía mucho tiempo que no descansaban".
"Yo lo escuché de otro compañero de ellos, acerca de que estos dos choferes estaban de franco y los convocaron a trabajar por la falta de choferes que tenían. Así que esto también podría ser una de las causas del vuelco, porque vendrían cansados", dijo el jefe de los bomberos a la radio rosarina.
El lugar del accidente es una recta bien marcada. Un pasajero le comentó a la agencia de noticias Télam que observó que el chofer -que falleció en el accidente-, estaba cansado y le sugirió que descansara.
No obstante, fuentes policiales señalaron que la intensa tormenta que caía en el momento del accidente y el estado de la ruta pudieron influir en el trágico suceso.
Por otra parte, el micro Cata no pudo continuar su trayecto por la ruta 7, porque después de atravesar Rufino esta vía de acceso tiene un tramo de unos 16 kilómetros anegados por la laguna La Picasa. Para sortear este obstáculo se construyó un camino alternativo que aún no está asfaltado por lo que no se puede utilizar cuando llueve.
Cuando esto sucede, los vehículos que circulan hacia Buenos Aires, toman la ruta 33 hasta Venado Tuerto para continuar desde allí a través de la ruta 8.
Trasladan a familiares
La mayoría de los pasajeros dormían cuando se produjo el accidente y varios de ellos coincidieron en señalar que se despertaron cuando el micro de dos pisos comenzó a hacer "zig-zags" a alta velocidad y perdió el equilibrio. Y a partir de ese momento se desató la tragedia, que provocó la muerte de ocho personas.
El colectivo, modelo 1997, volcó sobre su costado derecho, derrapó unos treinta metros y quebró un grupo de árboles plantados al costado de la ruta.
En tanto, en la tarde de ayer un colectivo de la empresa Cata partió desde la terminal de ómnibus de la ciudad de Mendoza con alrededor de veinticinco familiares de las víctimas accidentadas en Rufino.
"La empresa destinó un colectivo para trasladar unas veinticinco personas, familiares de las víctimas accidentadas y otro vehículo partió desde Buenos Aires para trasladar el resto de los pasajeros a la Capital Federal", informaron voceros de la empresa.