Rodolfo Montes / La Capital
Julio Aurelio es el sociólogo y analista de opinión pública y tendencias electorales que más acertó a la hora de predecir ganadores. Cuando otros erraron, él avisó que ganaba Raúl Alfonsín en el 83, Carlos Menem en el 89 y 95, y Fernando de la Rúa en el 99. Con extrema minuciosidad y prudencia analizó con La Capital el momento de gran incertidumbre electoral que vive el país cuando faltan apenas diez días para los comicios presidenciales. Anticipa 17 millones de votos positivos, en un panorama de gran paridad, con Menem y Néstor Kirchner con el 20%, sacándole una luz a Adolfo Rodríguez Saá, con Elisa Carrió un escalón abajo y con Ricardo López Murphy haciendo una atropellada final que no está claro hasta dónde lo puede llevar. -¿Cómo se entiende el alto rechazo a Menem y, paralelamente, la creencia de que gana? -El nivel de rechazo a Menem está en el orden del 50% y no en el 70% como suele decirse. Sin embargo, al día de hoy en una polaridad Menem anti-Menem, en una segunda vuelta, el panorama para el riojano es claramente adverso y es muy difícil que pueda ganar en una situación así. -¿Habría voto oculto para Menem? -Hay un porcentaje de gente que dice que va a ganar Menem, pero ante la pregunta si lo va a votar, dice que no. En este caso yo no lo tomaría como síntoma de encubrimiento del voto. Si ganara Menem sería por otras razones y no por voto oculto o por voto vergonzante. Hoy ningún candidato avergüenza más que otros. Más aún, detectamos votos por Menem expresados de un modo hasta desafiante, una especie de venganza, que incluso podría darse que después no se concrete. -¿Cómo está el panorama general para el 27 de abril? -Es un contexto de paridad muy fuerte y podría continuar hasta el final. Hasta hoy no hay tendencias que señalen una definición distinta, digamos con uno o dos candidatos superando claramente al resto. -¿Quién puede dar una sorpresa? -El único dato distinto es el avance de López Murphy. Su presencia ascendente ya no es una sorpresa; la pregunta es si mantendrá o no la tasa de crecimiento que tiene hasta hoy y que es claramente superior a la de los otros candidatos. -¿Puede entrar al ballottage? -Si continúa creciendo así, podría entrar tercero. Que llegue a la segunda vuelta es menos probable pero no imposible. -¿Es difícil predecir un panorama electoral con el PJ y la UCR desarticulados? -Con respecto a la ruptura del bipartidismo histórico de la Argentina todavía tenemos mucha incertidumbre. No está claro cómo quedará el panorama a mediano y largo plazos. Por ahora hay sólo hipótesis. -¿Dónde se supone que irá el voto tradicional peronista? -Si pensamos en Kirchner, Menem y Rodríguez Saá, vemos que son propuestas muy diferenciadas, donde ni siquiera está la intención ni la preocupación por parte de los tres candidatos de responder a un basamento doctrinario justicialista, aunque sea tratando de adaptar aspectos de la doctrina de Perón. -¿Ya no les importa pelear el "verdadero voto peronista"? -La unidad partidaria en el PJ ya ni siquiera es un tema, no es una preocupación de los candidatos. -¿Habrá voto bronca otra vez? -Los sucesos de diciembre de 2001 tuvieron su fuerza inicial en algún segmento de la sociedad al que luego se sumaron otros sectores, pero de manera circunstancial. Porque muchos argentinos amagaron con una remoción total de las estructuras políticas con el "que se vayan todos", pero después se asustaron y volvieron en parte a las estructuras partidarias preexistentes. -¿Qué expresión tendrá en las urnas? -El fenómeno está, no desapareció, y se va a expresar electoralmente. Sin embargo, el voto positivo será de unos 17 millones, un número crucial para determinar los porcentajes que obtengan los candidatos y, entre otras cosas, determinar si hay o no ballottage. -Ya no será el aluvión de rechazo que hubo en el 2001. -El "voto bronca" tendrá una expresión menor a la de octubre del 2001, cuando el voto positivo alcanzó apenas un 52,5% del total del padrón, el nivel histórico más bajo. Para el 27 de abril se prevé un 65% de votos positivos. -De los 17 millones de votos positivos que usted prevé, ¿cuántos sumarán las tres listas de origen justicialista? -Podrían sumar en conjunto entre 10 y 11 millones de votos, pero no es correcto considerar esos votos como justicialistas. No se pueden comparar la suma de estas tres listas con los votos que obtuvo históricamente el justicialismo. -Menem quiso llevar a Lole al acto de cierre de su campaña y Reutemann se negó. ¿Le hubiera aportado algo al riojano? -La temática de Lole candidato ya pasó, ya fue. Si hoy Lole dijera -haciendo una hipótesis irreal- "momento, pido prórroga, cambié de idea y quiero ser candidato", la gente le diría "ahora es tarde, mejor quedate en tu casa". Además, hay que decir que Lole, a nivel nacional, nunca fue un candidato puesto como dicen equivocadamente muchos medios. Antes de rechazar su candidatura no tenía clara superioridad sobre otros. Su mejor momento se encendió cuando se fue y no antes. Sin embargo, no tengo dudas de que la imagen personal, política e incluso de gestión que tiene Reutemann en Santa Fe es excelente, y ahí preserva su base de sustentación.
| "Vimos votos por Menem expresados de modo desafiante". | | Ampliar Foto | | |
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