Boca le ganó a Racing y sigue puntero. River hizo lo propio con Independiente y se mantiene arriba. Vélez superó el sábado a Unión y también es líder. Pero lo más importante para Rosario es que Central se acerca a la cima y se aleja de la zona roja, mientras que Newell's volvió a ganar y escala posiciones. Y de esta manera los hinchas de la ciudad revitalizaron sus expectativas con la fuerza que sólo otorgan las victorias.
Ahora sí Central depende de Central. Porque al principio de esta lucha estaba en el descenso directo, tenía la obligación de sumar y debía esperar que varios rivales no lo hicieran. Ahora ni siquiera está en la zona de promoción. Sólo tiene que sumar sin preocuparse por lo que suceda con el resto. Porque Huracán quedó a once puntos, Unión a cinco y Talleres sigue a uno. Mientras que Nueva Chicago y Banfield, que dividen por dos, también están detrás.
Pero esta carrera ascendente de Central no sólo preocupa a los de abajo sino también a los que están algunos puntos arriba en la tabla del promedio, como Lanús por ejemplo, que está a sólo cuatro unidades por encima del canalla.
Y en esta pelea sin respiro, los auriazules continúan acumulando puntos vitales para alcanzar el objetivo trazado, unidades conseguidas que por añadidura sitúan al equipo de Russo en una posición expectante en el lote de vanguardia. Tan expectante como promisoria. Aunque para el técnico centralista de eso no se habla.
Por su parte, Newell's consiguió su tercer triunfo en el Clausura y se ubicó en el grupo de los ocho equipos que comandan el torneo, consolidando la recuperación anhelada por todo el pueblo rojinegro.
Luego de su exitosa excursión a la capital santafesina frente a Unión, el conjunto del Bambino Veira superó a Banfield en el Coloso con dos goles de Silvani, victoria que fortalece el estado anímico de un plantel que supo superar varios escollos.
Debido a esto, en la tabla general de los dos torneos, Central (43 puntos) está clasificando para jugar la Copa Sudamericana y Newell's (40) está a sólo tres unidades de esa meta.
Pero todavía falta mucho por jugar. El domingo se disputará la décima fecha, jornada que marcará la mitad del Clausura. Y ese día Central recibirá a River y Newell's visitará a Boca. Rosario vivirá una tarde muy especial. Porque canallas y leprosos confrontarán con los grandes y punteros. Todo un país estará pendiente de lo que suceda en estos encuentros. Y será una inmejorable oportunidad para demostrar que el buen juego está más allá de la General Paz. Tal como ya fue inscripto alguna vez en la historia del fútbol argentino.
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La Ciudad
