Y al décimo partido volvió a ganar. En la misma cancha, allá en Victoria, pero ante diferente rival. Aquella vez, el 7 de diciembre del año pasado, sumó los tres puntos con un triunfo por 2 a 0 sobre Tigre, con goles de Vella y Laviano, dos que ya no están. Después llegó la sequía. Adrián Taffarel dejó la dirección técnica luego de tres derrotas consecutivas (ante Cambaceres, Armenio y Tristán Suárez) y llegó Roberto Sosa como nuevo DT. Sin embargo, los resultados tampoco aparecieron. Un solo punto, de local ante San Miguel, en seis partidos (derrotas ante Temperley, dos veces, Italiano, Ferro y San Telmo) y cambio de mando otra vez. Entonces, Pablo Marini cambió la vieja camiseta salaíta con el número 9 en la espalda por la de técnico y su debut no pudo haber sido mejor: con el triunfo tan esperado. Y así se dio el viejo refrán de que técnico que debuta gana. Y la gran noticia es que fue en condición de visitante. Otra vez en cancha de Tigre, ahora con el 1 a 0 marcado por Vázquez, algo más de cuatro meses después de aquella última vez.
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