Washington. - La percepción entre los estadounidenses de que su país marcha fácilmente hacia una victoria en la guerra contra Irak ha caído drásticamente, según un nuevo sondeo de opinión, mientras Washington libra una batalla de imagen dentro y fuera de EEUU. Una encuesta de Gallup para la cadena CNN y USA Today mostró el viernes que el apoyo de la población a la guerra se mantuvo en 70%, en línea con otros sondeos divulgados el mismo día.
Sin embargo, el número de estadounidenses que piensa que el conflicto va "muy bien" cayó fuertemente tras informes noticiosos sobre reveses en el frente de batalla y la cautela que ha mostrado el presidente George W. Bush para evitar comentarios sobre una rápida victoria.
Según Gallup, sólo el 34% de los encuestados entre el lunes y el martes piensan que la guerra va muy bien, contra 44% del domingo, día en que la televisión iraquí mostró imágenes de soldados estadounidenses muertos y capturados. Ayer, el porcentaje era de 62%. Por su parte, una encuesta de la cadena CBS dijo que el 55% de los consultados cree que EEUU había subestimado al ejército iraquí, mientras que un sondeo de la cadena ABC y el Washington Post señaló que el 57% de los estadounidenses espera que la guerra dure meses y no semanas.
David W. Moore, editor jefe de organización Gallup, dijo que la expectativa pública sobre la duración de la guerra y de las bajas que podría tener EEUU podría variar, a pesar de que el nivel de aprobación a Bush probablemente se mantenga. "Teniendo en cuenta que la gente sigue muy de cerca los acontecimientos, no me sorprendería que se registren más cambios en las expectativas", dijo. "Pienso que la cobertura de la televisión ha tenido un impacto", agregó.
Enojo de Bush
La frustración irrumpió a la puerta del gobierno de Bush el viernes, cuando la cobertura noticiosa de la guerra -en particular de periodistas que el Pentágono "insertó" en unidades de combate- pareció cambiar la percepción del público, más allá de los discursos oficiales.
Un alto funcionario del gobierno dijo que Bush pensaba que eran "tonterías" de los periodistas el introducir dudas acerca de cómo se estaba desarrollando la guerra y cuestionar el plan de lucha.
El secretario de Defensa Donald Rumsfeld acusó a los medios de mostrar "cambios de humor" a pesar de lo que calificó como sólidos progresos de las fuerzas estadounidenses y sus aliados británicos, apenas a una semana de la invasión a Irak. "Para algunos, el masivo volumen de televisión -y es masivo- y la intensidad de los reportes pueden llegar a ser desorientadores", dijo Rumsfeld. "Afortunadamente, mi percepción es que el pueblo estadounidense tiene un muy buen centro de gravedad y puede absorber y equilibrar lo que ve y oye", agregó.
Algunos expertos no están tan seguros. Kelly McBride, docente del respetado centro de periodismo Instituto Pointer, dijo que las imágenes son siempre mucho más poderosas que una "cabeza parlante" y que a veces lo que muestra la televisión no tiene el suficiente contexto. "A veces se tiene el sentimiento de «Oh, mi Dios, estamos perdiendo la guerra»", dijo McBride. "Lo que uno recuerda son las situaciones dramáticas y las imágenes de personas heridas o las imágenes gráficas de los combates", añadió.
Judith Kipper, experta sobre el Medio Oriente en el Consejo de Relaciones Exteriores, dijo que las declaraciones de Rumsfeld probablemente no ayudarán a la imagen de EEUU en la región, donde las tomas de víctimas civiles iraquíes mostradas por la televisión de Irak y de otros países árabes han encendido el sentimiento anti-estadounidense. (Reuters)