Los piqueteros se quedaron con las ganas

Los piqueteros nucleados en la Coordinadora de Trabajadores Desocupados Aníbal Verón realizaron ayer un escrache al presidente Eduardo Duhalde, a nueve meses del asesinato de los jóvenes Darío Santillán y Maximiliano Kosteki, pero un vallado policial impidió su llegada a las puertas de la casa del primer mandatario. La policía instaló un cerco a tres cuadras del domicilio de Duhalde, ubicado sobre la calle Ramón Falcón, en Lomas de Zamora, para impedir que los piqueteros lleguen a las puertas del domicilio. Duhalde, por la mañana, había asegurado que no iba a "hacer nada" frente a la protesta que fue anunciada anteayer por los referentes de la Aníbal Verón. La Coordinadora manifestó, en este sentido, que "las declaraciones del presidente nos resultan sorprendentes y agraviantes, ya que no sabemos si no nos entendió o nos está tomando el pelo". El escrache al jefe del Estado fue encabezado por la madre de Kosteki, Mabel Ruiz, y el padre y el hermano de Santillán, Alberto y Leonardo.