Alvaro Torriglia / La Capital
El secretario de Agricultura, Haroldo Lebed, pasó todo el miércoles en Rosario. En una prolongada jornada, declaró por una causa penal y participó de una audiencia de conciliación en los tribunales federales. Todo relacionado con el reclamo que planteó el frigorífico Fricop por la adjudicación de la cuota Hilton. Al final del día, el acuerdo con la empresa estaba sellado, a partir del otorgamiento de 150 toneladas de cuota que prestó otro frigorífico. En diálogo con La Capital, Lebed defendió lo actuado en el marco de la distribución del cupo de exportaciones a Europa pero adelantó que está trabajando en el borrador de un decreto para dar mayor fuerza legal a la resolución que hoy rige el reparto. "Lo mejor es la ley del Congreso pero mientras se puede avanzar en el decreto para que no sea motivo de zozobra y angustia cada vez que un secretario tiene que firmar la adjudicación", dijo el funcionario, quien aseguró que luego de la devaluación el campo "encontró un norte" y anticipó que la semana próxima volverá a reunirse con las entidades agropecuarias, por primera vez luego del paro de la cadena agrocomercial.
-¿Cómo fue el acuerdo con Fricop?
-No fue un acuerdo sino que cumplí parcialmente con la medida cautelar que dictó el juez federal Omar Digerónimo. Básicamente, a partir de un pedido mío, la empresa Swift accedió a realizar un préstamo a la Secretaría para poder otorgarle 150 toneladas de cuota Hilton a Fricop, que quedarán como crédito para Swift en la próxima adjudicación. Esto significa aproximadamente 3 millones de pesos, que le permitirán a la empresa tener movilidad, financiamiento, pagar salarios y retomar operarios despedidos. Fricop, a partir de esta gestión, reincorporará a 70 empleados. A nosotros nos preocupaba fundamentalmente el mantenimiento dela fuente laboral. Creo que hemos logrado ensamblar la demanda de la empresa, el reclamo del sector gremial y la voluntad de la Secretaría de cumplir con la medida cautelar. Así, de un total de 617 toneladas que el juez ordenó adjudicar a Fricop, descontamos las 230 que consolidamos por exportaciones a cuenta, sumamos estas 150 y quedan 237 que serán otorgadas con la próxima distribución.
-Para próximas adjudicaciones sigue la condición de que la empresa cumpla con los requisitos de past performance.
-Esperamos que luego de estos meses de conflicto, desde esta semana iniciemos un nuevo estadio de colaboración en la relación con Fricop. No hay un compromiso en ese sentido porque hay un marco legal que respetar pero ofrecimos nuestra inteligencia y buena fe para que la empresa puede participar de la cuota si cumple con los requisitos. En esto quiero ser bien claro porque en muchos años de carrera es la primera denuncia que debo afrontar. Yo le acerqué al juez todos los antecedentes que avalan que en la distribución por la que había quedado afuera Fricop actué ajustado al marco legal que daba la resolución 914. Cuando la gente haga el seguimiento de por qué Fricop quedó afuera de la adjudicación verá que el 15 de agosto, cuando asumí, había un piso de past performance, que es la exportación no Hilton, de 300 toneladas. Planteé que, teniendo en cuenta que se había exportado el 50% en la gestión anterior a la mía, necesitaba el mayor consenso posible. Y la industria entendió. Entonces propuse bajar el piso a 150 para que entraran más plantas. En el caso de Fricop, había exportado 95, por lo tanto no le alcanzaba pero igual consolidamos los embarques que había hecho. Luego se generó una acción judicial que, a la luz de lo que pasó en el día de hoy (por el miércoles), es un tema superado.
-¿Qué medidas se van a tomar para evitar los conflictos en la distribución de la Hilton, que son un clásico a esta altura?
-El reparto de la cuota siempre fue motivo de conflicto porque es un corte especial y de valor importante. No obstante, quiero resaltar que cuando me tocó distribuir lo hicimos en base a transparencia y consenso. Estuvimos 19 días discutiendo. Hubo tiempo para que todos hicieran su planteo. De todos modos, la distribución es perfectible y con el ministro Fernández y la industria venimos hablando de mejorar la herramienta legal, a través de un decreto de necesidad y urgencia. Esto va a ser más contundente que la resolución. Igualmente, pienso que una ley votada por el Congreso es lo que requiere para saldar definitivamente la cuestión. Pero un decreto ya sería un paso adelante para que esta distribución no sea una carga y motivo de angustia y zozobra para un secretario cada vez que tiene que firmar la adjudicación.
-¿La distribución del nuevo período de la cuota Hilton la va a firmar usted?
-Si sabemos trabajar en tiempo y forma podremos trabajar en consenso para firmar la adjudicación antes del cambio de gobierno. Desde el lunes estaremos trabajando en el tema.
-¿La Secretaría flexibilizó los requisitos de exportación porque los frigoríficos tienen problemas para cumplir con la cuota?
-Dentro del marco legal que tenemos, al 1º de marzo debían ejecutar el 70% de la cuota que correspondía a cada planta. Hubo quienes no alcanzaron y ante el reclamo generalizado, apliqué el sentido común y flexibilicé la medida, teniendo en cuenta que hubo una demora por parte de la comunidad europea en aprobar el listado de plantas habilitado para exportar. Debía estar en septiembre y llegó recién el 28 de enero. Eso hizo que muchas plantas no pudieran comenzar a hacer la cuota asignada.
-¿Qué resultados tuvieron las inspecciones europeas por presunto fraude comercial?
-La inspección de la Oficina de Lucha contra el Fraude se generó porque habían recibido denuncias sobre presunto fraude. Vinieron al Senasa y la Sagpya, efectuaron una revisación de los certificados emitidos por la Sagpya y visitaron dos plantas y un establecimiento agropecuario. Y comprobaron que lo que se ponía en el certificado era lo que se estaba exportando: animales de hasta 460 kilos, no más de dos dientes y criados a campo. Lo pudieron ver en el terreno y no hubo inconveniente.
-¿se va a cambiar el protocolo de la Hilton?
-Se está trabajando en cambiar el protocolo sobre el biotipo a exportar dado que algunos países como Alemania, principal importador, prefiere animales de mayor kilaje. Y el biotipo que hoy está vigente habla exclusivamente de razas británicas y sus cruzas, no habla de razas continentales. En el nuevo biotipo, lo que se está pretendiendo incluir es todo tipo de raza y con un kilaje superior a los 460 kilos. Sí permanecerá la condición de cría a campo, que es donde hacemos la diferencia.
-El año pasado los frigoríficos trabajaron muy bien y recuperaron mercados. Hoy hay empresas que están suspendiendo gente, reclamos por los reintegros y ciertos síntomas de crisis. ¿Este año será peor que el anterior para el sector?
-No, lo que sucede es que los frigoríficos tuvieron su verano en los primeros meses de 2002, donde compraban el novillo a 0,80 centavo el kilo y vendían a 7 u 8 mil dólares la tonelada. La hacienda pasa a valer 2 pesos el kilo y ahí "sufren" una merma en el rinde de su ganancia. Pero creo que ha sido un excelente año el 2002 para los frigoríficos y ahora entrarán en una sana competencia donde básicamente van a destacarse aquellos que han invertido en mejorar su tecnología y las normas de calidad de las carnes. Hoy hay una gran demanda de carnes en el mundo y la situación sanitaria de Argentina mejoró notablemente. Posiblemente para fin de año ya se esté abriendo Canadá y en los primeros meses del año entrante Estados Unidos. Sí entiendo que los ha afectado el hecho de la demora del gobierno en la devolución de los derechos a la exportación.
-¿No prevén un escenario de cierres de frigoríficos?
-No. La Argentina está pasando un proceso muy importante en un año sin aftosa durante el cual se recuperaron 64 mercados de los 67 perdidos en el mundo. Quiero ser contundente. No podemos perder la memoria de lo que le pasó a la Argentina, producto de la irresponsabilidad de algunos. 54 mercados sobre 67 es un número más que elocuente para pensar en un futuro favorable aunque haya veranos y menos veranos. Lo importante para la industria es la previsibilidad, y el primer deber es trabajar seriamente entre el Estado y los privados.
-El año pasado se vaticinaba un dólar por la nubes. Ahora crece el temor en el sector agropecuario por la baja de la divisa. ¿Esto puede afectar las previsiones para este año?
-Hay que segmentar al campo por su realidad productiva. Cuando vino la devaluación se hablaba de dólar a 18 pesos y de hiperinflación. Muchos de esos mismos actores, cuando pasó el tiempo, reconocen los beneficios de la devaluación y se preguntan ahor por qué baja el dólar. De todos modos, el sector agropecuario no es homogéneo. El campo encontró un norte a partir de este gobierno pero hay una década atrás de endeudamiento y falta de rentabilidad.
-¿Volverá a reunirse con las entidades agropecuarias?
-El próximo miércoles convoqué a la mesa nacional agropecuaria, con agenda abierta. Nunca se cortó el diálogo a pesar del paro. Respecto del ajuste en ganancias, hubo una respuesta contundente de Economía. Respecto del IVA, el 10,5% no daba IVA neutro, tal como lo plantearon las entidades. En las últimas reuniones participó la Afip y se comprometió a resolver cualquier asimetría que hubiera.
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La Ciudad
