Carlos Colombo / La Capital
El candidato a vicepresidente por el Frente por la Lealtad, Juan Carlos Romero, aseguró ayer que la fórmula que integra junto a Carlos Menem "gana la primera vuelta", pero consideró que todavía falta trabajar para "motivar a la gente para que entienda que ése es el voto que vale", porque si hay ballottage "puede ser un salto al vacío" pronosticó. El gobernador salteño consideró que la Alianza y Eduardo Duhalde "empeoraron todo" en la Argentina y que los mejores indicadores que marcan las posibilidades del binomio es que "la única preocupación" que tienen "todos los candidatos y el gobierno es Menem". Romero fue recibido en La Capital por el presidente del Comité Editorial, Orlando Vignatti, y anoche disertó en una cena organizada por la Unión para la Apertura Universitaria (Upau).
-¿Ganan en la primera vuelta?
-Eso es lo que nosotros esperamos, pero para ello tenemos que convencer a la gente de que nos vote en primera vuelta. Tenemos que motivarla para que entienda que el voto que define es el de la primera vuelta, porque ahí se define una etapa en la que hubo mucha presión por parte del gobierno -que fue denunciada por intendentes y gobernadores- tratando de generar una polarización para buscar levantar a su candidato oficial (Néstor Kirchner). El gobierno pretende hacer en segunda vuelta una nueva alianza, como la del 99, juntando todo el antiperonismo, hoy disfrazado de antimenemismo.
-Las encuestas marcan cierta paridad entre los tres candidatos justicialistas, ¿cuáles son los números que ustedes manejan?
-Nuestras proyecciones de los primeros días de marzo nos dan arriba del 35 por ciento en algunos lugares y en otros más, pero esperamos pasar el 40 por ciento.
-¿Entonces no hay segunda vuelta?
-Lo que está seguro es que ganamos la primera vuelta y si logramos una diferencia mayor de 10 puntos no hay segunda vuelta. Por eso hay que convencer a la gente que nos quiera votar que lo haga en primera vuelta, porque la segunda puede ser muy peligrosa, puede ser un salto al vacío.
-Ayer se conoció una encuesta de la consultora Equis que lo da a Kirchner primero con 20 puntos, segundo Rodríguez Saá con 18 y tercero Menem con 14,5.
-Esa y otras encuestas más son las que encarga el gobierno. Están todas sesgadas, primero porque la encarga el gobierno y segundo porque muchas trabajan sobre el teléfono y hay un millón trescientas mil personas que se descolgaron del teléfono desde la crisis, y a esa gente nadie la consulta. También hay muchísimos pobres que nunca tuvieron teléfono, ahí es donde cambian las encuestas. De Córdoba hacia arriba tenemos una diferencia de 20 puntos y en las provincias centrales estamos 10 punto arriba, si no estuviéramos ganando no estarían tan preocupados en hacer una alianza para la segunda vuelta.
-¿Le preocupa una eventual segunda vuelta?
-Cuando Duhalde tenga el convencimiento de que Menem gana es capaz de hacer cualquier maniobra, porque es una práctica del duhaldismo no tener límites. Los hechos de Catamarca fueron una práctica muy duhaldista.
-Ya que mencionó Catamarca, ¿que habría que hacer con Luis Barrionuevo en el Senado?
-El Senado tiene que avanzar a fondo en la investigación de los hechos para saber si es responsable Barrionuevo o si se desbordó la cuestión porque el gobierno nacional no supo ni pudo garantizar un proceso electoral.
-¿Y si es responsable Barrionuevo?
-El Senado tiene que tomar medidas.
-Duhalde dijo ayer que Menem es el responsable del empobrecimiento de la sociedad argentina.
-El aprovechamiento del lenguaje para confundir a la gente es una práctica muy antigua. Todo lo que se diga de este tema es una falacia absoluta. Pareciera que Menem sigue gobernando, pero en diciembre va a hacer cuatro años que dejó el gobierno y no hay ningún indicador que hoy no esté mucho peor que en el 99. Culpar al que gobernó antes de lo que pasa ahora es una falacia absoluta, es absurdo. La duplicación de la pobreza y los 10 millones de indigentes son cosas que generó el desastre de la Alianza y los gobiernos que la sucedieron, incluido el actual. Eso es obvio y la gente lo sabe. Por eso quieren una polarización, para engañar la gente, pero la gente no se va a dejar engañar dos veces. Ya la engañó la Alianza, que cuando llegó dijo que iba a acabar con todos los males de la Argentina, y por no saber gobernar estamos hoy en manos de este gobierno y todo está peor. La misión de los gobiernos es corregir lo que está mal y profundizar lo que está bien, y en el 99 no se hizo nada de ello. Lo que estaba mal quedó peor y lo que estaba bien quedó destruido.
-Ahora Carrió dice que votar por Menem es votar para entrar a la guerra...
-Menem nunca dijo que está bien la guerra. Dijo tres cosas: que hay que acatar las resoluciones de Naciones Unidas; que está en contra del terrorismo, que no se puede ser neutral y habló de los gobiernos que protegen al terrorismo, y, por último, se mostró a favor de buscar siempre una solución pacífica. Así que decir ahora que iríamos a la guerra es absurdo, porque Menem no lo planteó. No estamos en esa circunstancia, y es posible que cuando lleguemos al gobierno ya no haya guerra, es toda una utopía. Lo que sí se advierte es que todos los candidatos, tanto los de la oposición como el del gobierno, la única preocupación que tienen es Menem, y eso a veces nos ayuda.
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