La carrera de Fernán Mirás es un tanto atípica. Es un actor con apenas 33 años pero ya es un viejo conocido de la pantalla. Actuó en unitarios de culto como "Atreverse", de Alejandro Doria, hace diez años, y participó en "Culpables" y "Vulnerables", de Pol-Ka. En teatro, aún es recordada su actuación de "El hombre frente al espejo", junto a Oscar Martínez, donde interpretaba a un adolescente que le pedía más cariño y comprensión a su padre. Esa obra se vio en los 90 en el Teatro El Círculo, y su participación levantó los aplausos del público.
Pero sin dudas su momento más exitoso fue cuando protagonizó "Tango feroz" en 1993, una de las películas más vistas de la Argentina, que le sirvió para convertirse en uno de las firmes promesas de la pantalla grande. Allí fue Tanguito, un músico idealista y polémico, que fue uno de los creadores de "La balsa", un himno rockero que aún perdura en los oídos de los argentinos.
Mirás demostró su versatilidad para adaptarse a distintos géneros y fue parte del elenco de las tiras "Chiquititas" y "Rebelde Way", de Cris Morena. Aunque para muchos esta participación significó un punto bajo de su trayectoria, él sintió que ambas experiencias le sirvieron y admitió que no se arrepintió de haberla realizado.
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La Ciudad
