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Respuesta a picadas en el autódromo

Soy un vecino del barrio Hostal del Sol y, según una carta de lectores publicada, una de esas personas que tanto enfadan al señor Ricardo Bulla. Sin embargo y antes que se enfade más, quisiera aclararle al señor que no es, de ninguna manera, la intención de nadie impedir la práctica de un deporte con tantos adeptos. Es cierto que los barrios Aldea, San Eduardo y Hostal del Sol se formaron a posteriori que el Autódromo (no así el vecino barrio de Fisherton ni la fauna de la zona, también afectados por los ruidos molestos); sin embargo, la implementación de una barrera de contención sonora no es algo que demande una gran inversión. Es más, es una inversión mucho menor que la que realizaron los vecinos de todos estos barrios edificando, arreglando calles públicas con dinero del bolsillo propio y parquizando... Calculo que con la inversión de uno solo de estos vecinos la gente "responsable" del Autódromo podría haber plantado una importante barrera de árboles de cierta altura que evitaría tantas cartas de vecinos molestos por el ruido, y por ende, su enojo. También quisiera indicar que dentro de los reclamos están las picadas a altas horas de la noche y las que se efectúan en las calles aledañas... calles que se encuentran lisas y mejoradas gracias al esfuerzo y la gestión de los vecinos. Evitar esto, ¿realmente afecta que usted disfrute su pasión? ¿Afecta al placer del fanático del fútbol no escupir, defecar u orinar en la vereda de los vecinos de Arroyito o del Parque? ¿O tal vez afecte a quienes se divierten en un boliche bailable que el mismo respete las reglamentaciones sobre contaminación sonora? Pues yo creo que no, que simplemente se trata de disfrutar con respeto.
Andrés Marano