Sólo el tiempo dirá si el punto que obtuvo ante el también muy necesitado San Miguel le servirá a Argentino para mantener la categoría. Si bien los salaítos están condenados a codearse con el fantasma del descenso hasta el final del torneo, lo cierto es que el empate que logró el último sábado debe servirle de ahora en más como una inyección de ánimo para encarar con mayor optimismo las fechas que se avecinan. Mientras tanto, los pibes de barrio Sorrento siguen entrenando. Ayer lo hicieron en horario matutino, mientras que para hoy la cita será en el Olaeta y en doble turno.
Atrás quedó San Miguel. Ahora el objetivo inmediato se llama Sportivo Italiano, el próximo de Argentino. Y tanto el cuerpo técnico como los jugadores son conscientes de que no pueden darse el lujo de dejar escapar más puntos. Caso contrario, seguirán mirando a todos desde lo más bajo de la tabla de los promedios.
Pero el técnico Roberto Sosa tendrá una dura semana de trabajo. Porque no sólo deberá evaluar el esquema táctico que pondrá de manifiesto ante Italiano, sino además tendrá que estar al tanto de cómo evolucionan los lesionados Damián Sciretta y el Pato Omar Genesio, pieza fundamental en la zona de volantes a la hora de generar peligro hacia el área rival.
Sobre Genesio, ayer no entrenó debido al golpe que sufrió ante San Miguel, que dicho sea de paso lo marginó del partido cuando promediaba el segundo tiempo, y fue sometido a una ecografía.
El cuanto al resto del joven plantel salaíto, cabe mencionar que todos están a disposición de Roberto Sosa, quien para hoy dispuso que la práctica se desarrolle en doble turno e irá delineando los pasos a seguir de cara al partido del sábado ante Italiano, por la segunda fecha de la segunda fase del torneo de Primera B.
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La Ciudad
