* En un trámite irregular (algunos lo definen "viciado") Ferrocarriles cedió en los 80 media manzana para que una empresa instale una estación de servicio. * La Municipalidad había declarado al terreno como de interés público para emplazar el parque Hipólito Yrigoyen; por lo tanto, no podía ir a un particular. * Nunca se regularizó la situación y el Onabe (organismo liquidador de Ferrocarriles), temiendo un juicio millonario del estacionero, propuso canjearle a la Municipalidad el terreno por otro de dos hectáreas frente al río que le pertenece. * Precisamente la Intendencia giró este convenio (entre Onabe y Municipalidad) al Concejo para que apruebe pero no avanzó: no logró ni siquiera votación en comisión. * Steiger, integrante de la comisión, denunció que el dueño de la estación le contó que alguien le pidió una coima de 10.000 dólares para destrabar. * Con estos elementos todo el mundo descarta el tratamiento y la aprobación del convenio porque nadie se va a exponer a sospechas. * Muchos sostienen que la Municipalidad se pierde un gran negocio porque iba a recibir un terreno tres veces más grande ubicado frente al río. Es el que guarda las instalaciones de la arenera Cid cerca del cruce de las avenidas De la Costa y Francia.
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