Todavía no asumió como arzobispo de Santa Fe y ya está envuelto en una polémica por un tema relacionado con el que obligó al alejamiento de ese puesto a monseñor Edgardo Storni. El obispo de Mar del Plata, José María Arancedo, está acusado de encubrir a un docente de una escuela católica que fue denunciado de abuso sexual contra 33 menores.
El domingo pasado, los padres de los chicos del jardín de infantes del colegio Nuestra Señora del Camino de Mar del Plata protestaron en silencio frente a la catedral de esa ciudad en repudio a la libertad extraordinaria de la que goza Fernando Melo Pacheco, profesor de educación física que presuntamente abusó sexualmente de los menores, pero también en abierta crítica a Arancedo por supuesto encubrimiento del docente.
"Justicia para los niños abusados", "Obispo: ¿por qué da la espalda a los niños abusados?", "Basta de abusos sexuales", "Hágase cargo sobre los abusos sexuales en un Colegio Católico" y "No se puede ir a Santa Fe si no soluciona los abusos sexuales de acá" decían las pancartas que llevaban los indignados familiares de los chicos.
El caso tomó estado público en octubre pasado y los padres están indignados con ciertos procederes de Arancedo. Uno de ellos fue directo contra el obispo de Mar del Plata: "Queremos que antes de irse, como católico salga en defensa de los padres y no de este profesor. No puede ser que el obispo vaya en reemplazo por un arzobispo que esta acusado de abuso sexual y sobre los casos que hay en esta ciudad no haya actuado y se haya quedado de brazos cruzados y ni siquiera haya dado su opinión".
En tanto, Arancedo salió al cruce de los padres. En una entrevista concedida a La Capital de Mar del Plata, negó las acusaciones. "En la Iglesia no ha habido nunca, ni en la intención ni en la acción, un deseo de ocultar nada", afirmó, para luego garantizar que "desde el primer día lo sacamos (a Melo Pacheco de su cargo) y nos pusimos a disposición de la Justicia para todo lo que necesitara".
"Sólo colaboré con la investigación"
También negó haber intervenido ante el camarista José Arriola para que concediera la libertad extraordinaria a Melo Pacheco y afirmó que las pericias ofrecidas por el colegio, con el visto bueno del Obispado, "sólo tuvieron por objetivo colaborar con la investigación".
Ante la conmoción por los últimos sucesos, el obispo reconoció que "llamaron varias personas, preocupadas. Mucha gente adhirió a mi nombramiento, pero otras personas me cuestionaron, diciendo que estaba ocultando lo que estaba pasando acá. Lamento todo esto, dado que en vez de terminar en Mar del Plata con la serenidad y la alegría que quería, estoy atravesando con muchísimo dolor esta difícil situación".
Pero Arancedo advirtió que asumirá en Santa Fe antes que se aclare el caso de Mar del Plata. "¿Qué mas quisiera yo que irme con este tema resuelto? Pero según tengo entendido todavía faltan aportar muchos elementos, realizar muchas pericias... Quizás este caso no se resuelva hasta dentro de varios meses y yo no puedo esperar para asumir en Santa Fe. Eso sí, antes de irme quisiera volver a reunirme con los padres, decirles cuál es la posición de la Iglesia en todo esto. Oí que algunos dicen que me voy porque estoy ocultando cosas, pero no hay nada de eso, nada más alejado de la realidad".
La Ciudad
