Paralelo al Foro Social y al Mundial de Educación realizado en enero en Porto Alegre, unos 30 mil jóvenes se reunieron en el Tercer Campamento Intercontinental de la Juventud, conocido como "La ciudad de las ciudades". El desarrollo democrático, los derechos humanos, la diversidad , el poder político, la ecología, formaron parte de la agenda de los cientos de talleres que le dieron vida a este encuentro. La asistencia mayor corrió por cuenta de los brasileños, seguidos por ciudadanos de países limítrofes, entre ellos la Argentina. "Lo interesante en este campamento fue poner en común la pluralidad de ideas, la diversidad de pensamiento que se volcó en cada encuentro", dijo Nicolás Montanaro, quien participó y coordinó talleres junto a otros jóvenes en el Campamento de Porto Alegre, representando al departamento joven de Ciudades Educadoras (Delegación América latina, con sede en la Municipalidad de Rosario).Si bien las conferencias de Lula, Chomsky o Chávez -recuerda Nicolás Montanaro- fueron las de más público, los talleres y asambleas que coexistieron en forma paralela en este campamento fueron los que movilizaron el debate sobre la democracia participativa. Es que la convocatoria decía: "La primavera de los pueblos no empieza en ninguna parte; por el contrario, empieza en todas partes, en cada lugar, donde hoy hombres y mujeres están probando maneras de organizarse en sociedad, en las que se prioriza la vida y lo humano en lugar de lo material y el capital."
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