Año CXXXVI
 Nº 49.758
Rosario,
miércoles  19 de
febrero de 2003
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Menopausia: Oportunidad de cambio
Según la psicóloga Beatriz Salto, esta etapa genera conflictos pero también posibilita un reencuentro

Belén Travesaro / La Capital

La menopausia provoca una descompensación hormonal que incide no sólo en el organismo, sino también en las emociones. Para la psicóloga Beatriz Salto esta etapa de la vida conlleva una crisis donde aparece la necesidad de un replanteo de las expectativas que puede derivar en un mejor posicionamiento ante la vida. "Por lo general el cese de la función reproductiva, que aparece entre los 45 y 55 años, coincide con la independencia de los hijos. En este momento es frecuente que las mujeres que dedicaron gran parte de su vida a la maternidad, se planteen retomar actividades personales que dejaron en el camino", explicó la profesional.
La mujer deja de estar demandada por los hijos y las obligaciones cotidianas, y dispone de más tiempo. "Es común que reflote intereses que habían quedado marginados, comience a buscar nuevas actividades o se plantee otras necesidades en su vida de pareja", dijo la especialista.

Reacomodamiento
Para la profesional el hecho que los hijos partan a vivir sus propias vidas genera una búsqueda de mayor intimidad y aproximación con la pareja, y por ende, "aparece una necesidad de reacomodamiento". A veces la disponibilidad de tiempo genera dificultades, agregó. Si se realizan actividades que simplemente llenan las horas, es probable que no encuentre sentido a lo que se está haciendo, y entonces aparezca la tristeza o la depresión. En el caso contrario, sobreviene el buen ánimo cuando se generan vínculos que enriquecen desde el punto de vista emocional.
La independencia de los hijos moviliza en la mujer cuestiones relativas a su propia autonomía respecto de los padres, explicó Salto. Es común que surjan sentimientos ambivalentes en relación a los hijos. "La mujer puede llegar a sentirse abandonada por ellos, sentimiento que no aparece cuando hay una elaboración progresiva de la libertad que ellos asumen", dijo.
En el caso de la mujer que no tuvo hijos y eligió dedicar su vida a la actividad profesional, social o artística, ahora sabe "que nunca más va a poder tenerlos", lo que puede provocar un deseo profundo de maternidad.

Percepción del cuerpo
La especialista explicó que la detención del ciclo reproductivo produce también cambios en relación a la percepción del cuerpo femenino. "Suele ocurrir que posteriormente a la menopausia se deje de asociar al cuerpo con la plenitud y se sienta un daño interno", dijo Salto.
Tanto en el climaterio como en la pubertad, "lo corporal vuelve a preocupar, ya que el cuerpo está en escena". En la menopausia, la disminución de los estrógenos genera cambios en el organismo que son silenciosos y otros más visibles como la pérdida de la masa muscular, aumento de los tejidos adiposos y adelgazamiento de la piel.



En el climaterio se replantean las expectativas de vida.
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