Ahora sí, por fin. Tras la firma del decreto presidencial que autoriza una asignación de 52 millones de pesos los constructores del Puente Rosario Victoria ya no tendrán más excusas para dilatar las obras y para el 25 de mayo -días más días menos- la conexión vial con el sur entrerriano finalmente se convertirá en realidad.
Para la mayoría de los rosarinos el puente representa la posibilidad de pasar a tener a la vuelta de la esquina y empezar a explorar la ciudad de las siete colinas y el resto del sur entrerriano y un acceso más directo a los balnearios del Uruguay para el pequeño segmento de la población que acostumbra a veranear en esas playas.
El común de la gente tiene una impresión difusa y alguna expectativa sobre el impacto económico que tendrá la integración, porque durante los últimos años los discursos oficiales machacaron sobre la importancia del corredor bioceánico y las potencialidades de la región para establecerse como un eje estratégico del Mercosur.
Con la semiplena certeza de que el gobierno de Eduardo Duhalde y del grupo Impregilo cumplirán con sus promesas, es buen momento para preguntarse qué hay de cierto en materia de economía y negocios entre ambas orillas del río Paraná, más allá de las frases rimbombantes.
Gran parte de la movida empresaria se mantuvo hasta ahora contenida porque pesaba la incertidumbre sobre la concreción de las obras. Acorde con el perfil productivo del sur santafesino y entrerriano, los negocios agropecuarios fueron los que avanzaron primero, tanto en el calendario como en la magnitud de las operaciones, pero también se muestran muy dinámicas las actividades inmobiliaria, la construcción y el turismo.
En los proyectos de inversión que ya están en marcha hay una fuerte presencia rosarina. El grupo empresario La Sibila, comandado por el titular de la Bolsa de Comercio de Rosario, Federico Boglione, dio una de las primeras puntadas en noviembre del año pasado, con la compra a Nestlé de la usina láctea localizada en la ciudad de Nogoyá, que está siendo reacondicionada para su relanzamiento.
Las empresas buscan horizontesÝ
La marca de los productos de La Sibila, Purísima, no es muy conocida pero si tiene una fuerte presencia en las licitaciones del Estado para compra de leche en polvo. En poco tiempo más se pondrán a producir unos 200 mil litros, que básicamente tendrán como destino la exportación.
El abastecimiento de la planta entrerriana deberá ser provisto, al menos en parte, desde tambos localizados en el interior santafesino y sur de Córdoba, de allí que el puente es de vital importancia para el desarrollo del emprendimiento.
"Tenemos la idea de exportar por el puerto de Rosario, esperamos que se termine cuanto antes para no tener que recurrir a las terminales de Paraná" enfatiza Boglione.
Más en etapa de incubadora, un segundo proyecto que está en marcha es la creación de un mercado concentrador de frutas y verduras en Victoria. Se sabe que la iniciativa es piloteada por un arquitecto rosarino pero no se conocen muchos detalles, salvo que incluiría una playa de estacionamiento para camiones y parador.
Otra apuesta que está en danza también es la relacionada con la actividad agropecuaria: una aspiración de Victoria es consolidar granos en la zona para derivarlos al cordón agroexportador de Rosario e incluso procesarlos a través de alguna factoría. Al respecto hubo sólo algunos sondeos preliminares. La municipalidad tiene reservada un área de 200 hectáreas con acceso al asfalto y abastecimiento de gas para la instalación de emprendimientos productivos, aunque el predio no goza de ningún régimen de promoción industrial.
Las expectativas de los victorienses con relación al futuro próximo no dejan de tener su cuota de contradicción. Por un lado existe está cierto temor a ser avasallados por una metrópoli como Rosario, por otro las nuevas posibilidades que se abre para el turismo.
"La construcción de un puente significa poner más cerca del mercado propio a los que están del otro lado y eso concentra riesgos en la medida en que uno no esté preparado". El copygright de la frase perteneces al economista Tulio Ceconi y respondió a una consulta del empresariado santafesino sobre la construcción de otra conexión vial a la altura de la capital provincial, pero se ajusta con propiedad a este caso.
Los victorienses aguardan la interconexión con previsiones de un fuerte proceso de reordenamiento de la actividad comercial. "Por la distancia somos concientes que vamos a pasar a ser como una localidad más del aglomerado Rosario", sostiene Daniel Zabala, presidente de la Federación Económica de Entre Ríos.
El desafío de crecer
Para el comercio de Victoria el nuevo escenario constituirá una parada difícil, porque parte de una situación de atraso ostensible y deberán afrontar no sólo el recambio de los proveedores sino la competencia en forma directa. "Nuestro comercio tiene precios altos. El que pudo aprovechar los márgenes de ganancias, e hizo un colchón ahora estará en mejores condiciones para adecuarse a la nueva realidad", destaca Zabala, que administra una tarjeta de crédito regional.
-¿Es cierto que hubo ofertas para comprar algún supermercado?
-Vino un grupo coreano que controla un tenedor libre en Rosario y estuvo en tratativas pero hasta ahora no concretó.
Otros emprendimientos que están más avanzados se relacionan con la actividad turística. El más importante de ellos es el Solar de Victoria, que comprende un predio de 572 hectáreas. Lo pilotean empresarios de la construcción porteños que tienen como socio en Victoria a un hijo del recordado doctor Matera y apunta a un segmento de segmentos altos, dispuesto a pagar una cifra por encima de los 40 mil pesos para acceder a un recinto premium.
El barrio cerrado se constituyó sobre terrrenos que eran inundables. Para una primera etapa se previó la venta de 83 lotes de 1.200 metros cuadrados, emplazados sobre un total de 11 hectáreas y para una segunda fase se espera colocar otros 800 lotes.
El lugar está atravesado por ríos, canales y con una laguna de 18 hectáreas ubicada en su centro, destinado a la práctica de deportes náuticos sin motor. Cada propietario puede contar con un muelle propio y la superficie total se encuentra dividida en seis islas interconectadas entre sí.
El Hotel Casino es otra de las ofertas para el turismo que se puso en marcha. El emprendimiento es piloteado por la constructora rosarina Cachero Kozuch y Sol Victoria SA. Ubicado sobre una de las colinas con vista franca a la zona recreativa de la costa, contará con 80 plazas de alojamiento de categoría tres estrellas. La explotación se concedió por el término de 40 años con opción a otros diez. El casino, que promete ser competencia directa del que está próximo a licitarse en Rosario, podría sufrir algunas dilaciones en su construcción por diferencias surgidas entre los concesionarios y el ente que administra el juego en Entre Ríos, en torno a las mutuas responsabilidades en materia de edificación contenidas en el contrato.
Existe una tercera iniciativa que está a punto de arrancar, el complejo La Colina, un conjunto habitacional que en su primera etapa contará con 150 plazas. Se efectuará por medio de un sistema de inversión compartida y el alojamiento se ofrecerá por día, semana o mes a turistas dispuestos a pagar la calidad del servicio (ver aparte).
Seguridad jurídica, una cuenta pendiente
Durante los últimos meses se estableció un flujo de contactos bastante fluido entre empresarios de ambas costas. Directivos de la Federación Industrial de Santa Fe (Fisfe), de Asociación Empresaria de Rosario (AER) y del grupo Trascender mantienen diálogos permanentes con autoridades y sus pares de la otra ribera para avanzar sobre proyectos de inversión.
Los empresarios de Victoria entienden que el paisaje y las características de su ciudad constituyen un importante anzuelo para atraer a turistas de fin de semana rosarinos. "Basta que un pequeño porcentaje de la población del sur santafesino, por más chiquitito que sea, repare en nosotros para que esto se convierta en un boom", sostiene Zabala.
Estas previsiones ya fueron convenientemente registradas y la especulación llevó a un encarecimiento de los terrenos loteables en Victoria. De todos modos, las operaciones inmobiliarias por ahora se hacen a cuentagotas, por una razón de peso. Existen problemas con el plan director que rige en la ciudad, aprobado durante la intendencia de Gracia Jaroslavsky, la hija del fallecido político radical.
Jaroslavsky ya no está más pero su sucesor, Eduardo Valverde, heredó una dura controversia en torno a la constitucionalidad del plan. Intervino la Fiscalía de Investigaciones de Entre Ríos con una posición adversa a la legalidad del instrumento y hoy el tema está en manos del Concejo municipal, que deberá resolver. Como hay fuertes entrecruzamientos políticos de por medio, de hecho se ha creado un vacío legal que conspira contra el negocio inmobiliario. Hoy es posible comprar un lote pero más complicado es escriturar. Es un tema que se tendrá que resolver rápidamente del otro lado de la costa, a riesgo de frenar inversiones.