El cineasta rosarino Héctor Molina estrenará el próximo jueves su película "Ilusión de movimiento", que protagonizan Carlos Resta, Matías Grappa y Darío Grandinetti y narra, según adelantó el director, "una historia sobre la búsqueda de la identidad", a través de las vivencias de un hombre que regresa a su hogar tras varios años de ausencia.
"La película habla de la identidad, de la importancia que tiene ponerle nombre y buscarle y encontrarle la esencia a las cosas", comentó el realizador, y añadió: "Intenta expresar el sentimiento que tiene una persona al volver a su hogar, a sus querencias, a sus amigos, al lugar donde transcurrió su infancia y donde se siente cómodo como persona".
Con guión del propio Molina, el filme se centra en las dificultades que se plantean en el seno de ciertas relaciones familiares, y lo hace a través del encuentro de un padre con su hijo de siete años, a quien no conocía, y en el vínculo que surge entre ambos, ya que se van descubriendo poco a poco y buscan modos de acercarse y vencer la desconfianza.
"Quería contar la historia de un tipo que vuelve a su casa después de muchos años y tiene que hacerse cargo de un pibe", comentó el realizador, y confesó: "Me interesaba mostrar cómo era ese proceso entre torpe, divertido y tierno que es el reconocimiento mutuo de dos personas que están ligadas por la paternidad, aunque a veces se confunda quién es el padre y quién el hijo".
Además, la película aborda las consecuencias que provocó en la vida del protagonista y en la de su entorno -sus familiares y amigos- la última dictadura militar, que lo afectó directamente y lo obligó a exiliarse después de observar, sin poder evitarlo, el secuestro de su novia por un grupo de tareas.
"El tema principal no es la dictadura militar o los pibes apropiados y restituidos a sus familias como es el caso del hijo del personaje central -señaló Molina-, pero tampoco lo quería usar solamente como un pretexto, porque hubiera sido como mirar al costado y hacerse el boludo".
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La Ciudad
