El equipo McLaren estudia la posibilidad de recurrir a la Justicia para bloquear la aplicación de nuevas reglas en la Fórmula 1, una medida a la que pueden sumarse otras escuderías, lo que garantiza un inicio de temporada de pujas y polémicas. Un portavoz de la firma inglesa objetó con dureza los cambios impulsados por la Federación Internacional de Automovilismo (FIA) y reveló ayer que se estudia la posibilidad de apelar a tribunales ordinarios, una acción que cuenta ya con el respaldo de Williams. "Decir que no al nuevo reglamento es una opción que tiene cualquier equipo que no esté de acuerdo con el proceso de cambio puesto en marcha por la FIA. McLaren está muy decepcionada tanto por algunas de las reglas decididas como por el modo en que se impusieron, sin consultar a nadie", declaró Martin Whitmarsh, vocero de la escudería inglesa. El representante de McLaren no negó también que ambas escuadras, formando un frente común, podrían aplicar el derecho de veto, previsto en el llamado "Pacto de la Concordia" de F-1. Ese acuerdo establece que todas las reformas reglamentarias, en especial las de aspectos técnicos, deben tener la aprobación de todos los equipos firmantes. El principal cuestionamiento que hacen McLaren y Williams es la eliminación de los diversos dispositivos electrónicos (control de tracción, sistema de largada y cambio automáticos, entre otros) que no estarán permitidos durante la temporada, que comenzará en el 9 de marzo con el Gran Premio de Australia. Ambos equipos afirman que esa restricción les provocará un grave daño técnico y también económico. Algunas de las modificaciones reglamentarias decididas por la FIA, luego de reuniones con los representantes de las escuderías, entrarán en vigencia desde el arranque de la temporada. Entre ellas, la prohibición de telemetría desde los boxes hacia los coches y las comunicaciones por radio entre pilotos y escuderías que no puedan hacerse públicas a través de la transmisión de televisión. Otras, como la telemetría desde el coche a boxes, se permitirá este año, pero se sustituirá la temporada 2004 por un sistema igual para todos los equipos. Algunas reglas, incluso, regirán a mitad del calendario. A su vez, sólo se permitirá el uso de un tercer coche si se daña el de carrera o si éste se avería antes de la salida, también se podrá utilizar en una nueva salida siempre y cuando no se hayan completado más de dos vueltas. Las máquinas tampoco podrán cargar combustible en el arranque de la prueba el domingo, ya que deberán permanecer con los litros de nafta que les quedaron tras las pruebas de clasificación de los sábados. (Télam)
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