Año CXXXVI
 Nº 49.754
Rosario,
sábado  15 de
febrero de 2003
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Presidente Quintana y Felipe Moré
Caen por robar un quiosco y amenazar a su dueña

Conocedora del barrio y de quienes viven de lo ajeno para esconderse luego en una villa miseria cercana, una mujer de 50 años que había sido víctima de un robo y alcanzó a reconocer a los ladrones, aportó las identidades de los maleantes a la policía y una patrulla del Comando Radioeléctrico los apresó. Claro que antes de que ello ocurriera, la mujer debió sufrir las amenazas de los asaltantes y sus familiares, a cuyos oídos llegó la noticia de que habían sido denunciados.
La madrugada del jueves Mercedes Fernández dormía en su vivienda de Presidente Quintana y Felipe Moré cuando ruidos extraños la sobresaltaron. Estaba sola ya que su marido trabaja por las noches y enseguida pensó que algún extraño se habían metido en el pequeño almacén que está al frente de la casa.
Entonces la mujer se despertó y con precaución se acercó al local. Así descubrió que un par de ladrones huían de la vivienda y creyó identificarlos. Sin embargo fue precavida y nos los enfrentó. Poco después notó que le faltaban un televisor, un centro musical, 40 atados de cigarrillos, la poca plata que tenía en la caja y alguna otra mercadería.
Indignada, Mercedes esperó la llegada de su esposo para ir hasta la seccional 19ª y radicar la denuncia la mañana del jueves. Allí dejó asentado que presumía quienes eran los ladrones y donde los podían encontrar. Esos datos, misteriosamente, habrían llegado hasta los oídos de los maleantes y entonces, los problemas de la mujer continuaron la noche de anteayer.
"Los mismos ladrones y algún familiar llegaron hasta el almacén y amenazaron a la mujer con un revólver y un cuchillo. Le dijeron que si los denunciaba la iba a pasar peor", aseguró un vocero policial de la comisaría que investiga el caso.
Pero Mercedes no tuvo miedo a las amenazas. Llamó al Comando Radioeléctrico, dio las identidades de sus agresores y una patrulla que llegó al lugar los apresó en la villa miseria que se levanta a unos 100 metros de la casa de la mujer.
Trasladados a la comisaría 19ª, los hombres fueron identificados como Ramón Marín, paraguayo de 50 años, al que le secuestraron un revólver calibre 32 con 7 proyectiles en su tambor; Luis González, de 20 años, que tenía en su poder un cuchillo de cocina; y un menor de 13 años que llevaba en sus manos un hierro de 20 centímetros de largo y tenía su punta afilada.


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