Berlín/Munich/París. - Coincidiendo con el primer día de sesiones de la conferencia anual de seguridad en Munich, la revista alemana Spiegel adelantó la existencia de un plan elaborado en secreto por Francia y Alemania para desarmar a Irak bajo el paraguas de las Naciones Unidas y evitar el estallido de la guerra. "Algo de eso hay seguramente", confirmó indirectamente esta noche el adelanto el ministro de Defensa alemán, Peter Struck. De Alemania habrá "mucho más que un no a la guerra", aseguró el ministro.
Struck se excusó de suministrar información detallada al respecto pero anunció que el canciller alemán, Gerhard Schroeder, expondrá la iniciativa en una declaración que pronunciará ante el Parlamento el jueves próximo.
La reacción oficial de Francia fue mucho más reservada. París negocia con todos los miembros del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas sobre un refuerzo de las inspecciones de armas en Irak, dijeron círculos diplomáticos galos.
De acuerdo con el artículo del Spiegel, titulado "La «Vieja Europa» planea una invasión de cascos azules en Irak", Berlín y París proponen que fuerzas de paz de la ONU asuman el control de Irak y ocupen el territorio durante varios años para garantizar el desarme. El plan bautizado "Mirage", el nombre de los aviones militares franceses, contempla que la totalidad del espacio aéreo de Irak sea declarada zona de exclusión. Aviones "Mirage IV" se encargarían de patrullar el aire y apoyar la labor de los inspectores, cuyo número sería triplicado y fuerzas del ejército alemán integrarían también el contingente de la ONU.
Blix en Bagdad, satisfecho
Spiegel señala que esta iniciativa podría ser presentada al Consejo de Seguridad como un proyecto de resolución francoalemana en el que laboran representantes de ambos gobiernos desde principios de año. La iniciativa ha sido elaborada a espaldas de Estados Unidos. El secretario de Defensa norteamericano, Donald Rumsfeld, dijo en Munich que se había enterado del plan "a través de la prensa".
El jefe de los inspectores de armas de la ONU, Hans Blix, dijo que las nuevas conversaciones de desarme con funcionarios iraquíes fueron "muy importantes". Blix y el jefe de la Agencia de Energía Atómica de la ONU, Mohamed El Baradei, iniciaron ayer una ronda de conversaciones de dos días en Bagdad como parte de los preparativos de un nuevo informe que deberá ser entregado el próximo viernes al Consejo de Seguridad y que podría dar comienzo al conteo regresivo para una guerra, o bien constituirse en un obstáculo para las intenciones de EEUU y Gran Bretaña.