Munich/Nueva York/Bagdad. - La profunda división entre Europa y Estados Unidos por el conflicto con Irak se hizo evidente ayer cuando el secretario de Defensa estadounidense, Donald Rumsfeld, calificó de "inexcusable" la posición contraria a la guerra de Alemania, Francia y Bélgica. Al mismo tiempo, Estados Unidos respondía desafiante con una declaración unilateralista a una advertencia del secretario general de Naciones Unidas, Kofi Annan, quien dijo que sólo ese organismo está autorizado por la ley internacional a declarar eventualmente una guerra a Bagdad. Crece así la confrontación entre Washington y sus aliados y el resto de la comunidad internacional. Alemania y Francia, a su vez, respondieron a la ofensiva norteamericana con un plan para lograr el desarme pacífico de Saddam Hussein (ver aparte).
Donald Rumsfeld, dijo durante una conferencia anual sobre seguridad en Munich reiteró que 12 años de esfuerzos diplomáticos, sanciones económicas y acciones militares limitadas habían fracasado para desarmar a Irak.
Rumsfeld calificó de "inexcusable" la posición de Francia, Alemania y Bélgica al obstaculizar los planes de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (Otán) para proteger a Turquía en caso de una guerra con Irak y dijo que minaba la credibilidad de la alianza.
Por su parte, el senador republicano estadounidense John McCain agregó que Francia y Alemania habían causado una "herida terrible" a la Otán y que habían socavado los esfuerzos para desarmar a Irak de manera pacífica. "Las acciones recientes de París y Berlín han incrementado las dudas de varias naciones a ambos lados del Atlántico acerca de su compromiso con la diplomacia multinacional", dijo en la conferencia.
El ministro de Relaciones Exteriores de Alemania, Joschka Fischer, manifestó que Berlín permanecía firme a sus obligaciones con los aliados de la Otán, pero defendió la postura contra la implementación de planes para defender a Turquía en caso de un conflicto bélico porque su país aún no está seguro de que se necesite una guerra. "No estoy convencido. No puedo hablarle al pueblo sobre las razones porque no creo en ellas", dijo,.
Alrededor de 15.000 manifestantes, esgrimiendo pancartas con consignas antibélicas y silbatos, se lanzaron a las calles de Munich en medio de una profusa nevada para protestar contra la amenaza de una operación armada contra Irak.
Fischer expresó que Alemania consideraba que el fin de la Guerra Fría había alterado el balance de poderes en el Medio Oriente y señaló que la principal amenaza eran los grupos extremistas musulmanes y no Irak, y que lo fundamental era lograr la paz en Israel.
La ministra de Defensa de Francia, Michele Alliot-Marie, dijo por su parte que París nunca ha descartado una acción militar para desarmar a Irak, pero que esto sería el último recurso después de finalizadas las inspecciones de armas.
Bush, por su parte, preparó a la opinión pública de su país para afrontar la guerra que se aproxima. En su mensaje semanal radial, Bush desgranó un rosario de advertencias contra Irak, que en su opinión justifican un ataque militar en una jornada en la que se comunicó telefónicamente con sus pares de Italia, China y Francia.
El jefe de la ONU vs. Washington
La Casa Blanca reaccionó fríamente a las declaraciones del secretario de la ONU, Kofi Annan, quien advirtió sobre una acción unilateral de Washington para desarmar a Irak, y expresó que la posición de Estados Unidos respecto a una "coalición de naciones" para lograr ese propósito es clara.
Annan declaró ayer, en un discurso pronunciado en el Williams and Mary College (Virginia), que cualquier decisión de desarmar a Irak por la fuerza debe ser tomada por la ONU y sólo en caso de que todas las demás alternativas fracasen.
El uso de la fuerza para hacer respetar las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU "es una cuestión que debe ser considerada no por un sólo Estado, sino por la comunidad internacional en su conjunto", advirtió Annan.