Mientras el gobierno celebró ayer la decisión de la jueza federal María Servini de Cubría de respaldar la convocatoria a elecciones generales para el 27 de abril próximo, desde los tribunales surgieron novedades. El congreso nacional del PJ, que podría ungir al candidato presidencial, ahora será controlado por un veedor judicial, que también va a monitorear al consejo partidario, que responde a Carlos Menem. Tras la audiencia que culminó sin que duhaldistas y menemistas conciliaran posiciones por las internas, Servini decidió auscultar a los bandos en pugna a través del abogado Ramón Ruiz, veedor de la Justicia. Por eso dictó una nueva resolución: impuso a Ruiz, nombrado veedor la semana pasada para fiscalizar únicamente a la junta electoral del PJ, la obligación de controlar también el funcionamiento del congreso (duhaldista) y el consejo. El PJ aún no definió a su candidato ni logró consenso respecto del mecanismo para su designación. El congreso suspendió las internas fijadas para el 23 de febrero y habilitó a Menem, Néstor Kirchner y Adolfo Rodríguez Saá a competir en las generales mediante neolemas. Pero el riojano planteó la nulidad de esa decisión ante Servini. Se presume que el lunes los fiscales electorales Jorge Di Lello y Jorge Alvarez Berlanda elevarán a la jueza un dictamen a favor o en contra de las aspiraciones menemistas. Luego Servini se pronunciará sobre el asunto (posiblemente la semana próxima), pero el fallo puede ser apelado por ante la Cámara Nacional Electoral. Esto extendería la pelea hasta que exista un pronunciamiento final que, de cualquier modo, quedará seguramente en manos de la Corte Suprema. Además, en la audiencia del jueves pasado, el titular de la junta, Rafael González, aportó un dato que será tenido muy en cuenta: explicó que "ya no hay tiempo material" para las internas.
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