El presidente Eduardo Duhalde sostuvo ayer que "no negociará" con las organizaciones piqueteras, aunque dijo estar dispuesto a escuchar sus reclamos, al tiempo que el Movimiento Territorial de Liberación (MTL) ya anunció nuevos cortes de ruta para el próximo lunes, en discrepancia con el manejo de los planes sociales para carenciados.
Por su parte, el vicepresidente de la Unión Industrial Argentina (UIA), Juan Carlos Lascurain, afirmó en la víspera que los movimientos piqueteros tienen como finalidad encontrar "una solución al problema social" del país, y sostuvo que "nadie puede ser feliz cuando hay tantos pobres".
Desde Punta Alta, Duhalde expresó que "entre los palos y el tiempo, yo prefiero un poco más de tiempo", al rechazar el uso de "la fuerza" por parte del Estado como forma de impedir los cortes de ruta que realizan los piqueteros para exteriorizar su protesta.
"No voy a negociar con los piqueteros", afirmó Duhalde, sino que "simplemente hay que escuchar a todos los sectores de la sociedad", al dar por sentado que se reunirá con los líderes del movimiento de desocupados, tal como había trascendido en distintos medios periodísticos.
Duhalde recibiría al líder de la Federación Tierra y Vivienda (FTV) Luis D'Elía y a Carlos Alderete, de la Corriente Clasista y Combativa (CCC) considerados los jefes del sector más dialoguista de las organizaciones piqueteras, la semana que viene, al tiempo que desecharía un encuentro con el ala más extrema, liderada por Raúl Castells.
Duhalde también cuestionó la modalidad de los cortes de ruta y también la protesta violenta de los ahorristas frente a los bancos, aunque también dejó en claro que no avala el uso de "la fuerza" para impedirlas.
"Esos sectores que son emergentes, los sectores más desvalidos de la sociedad, algunos van con martillos contra los bancos y otros hacen otras cosas que son todas actitudes que no son correctas", sostuvo.
Para el presidente, "hay dos formas de resolver" los conflictos: "Una, con la fuerza y otra dándole más tiempo. Yo prefiero la persuasión, darles un poco más de tiempo", afirmó.
Por su parte, en su habitual conferencia de prensa en la Casa Rosada, el jefe de Gabinete, Alfredo Atanasof, anticipó la voluntad del gobierno de convocar a estas organizaciones sociales para que colaboren con la ayuda social.
Sobre el manejo de los planes, Atanasof remarcó que "el gobierno tiene una política social dirigida al conjunto de la población más necesitada sin intermediaciones de ningún tipo".
Despolitizar la ayuda
Asimismo, el ministro sostuvo que "tampoco nos interesa que en esta etapa (la ayuda social) se politice y se mezcle con cuestiones electoralistas".
D'Elía y Alderete le plantearían personalmente al presidente sus reclamos de restitución de los planes de empleo dados de baja y un aumento del subsidio para los jefes de hogar de 150 a 300 pesos, y pedirían "trabajos genuinos" y la implementación de planes sociales para jóvenes y mayores de 60 años.
Anteayer, los piqueteros considerados "duros" realizaron 37 cortes en todo el país y reclamaron frente a varias empresas por puestos de trabajo genuinos.
Mientras, el coordinador nacional del MTL, Beto Ibarra, anunció que cortarán rutas y puentes a partir del lunes próximo, para que la ministro de Trabajo, Graciela Camaño, acceda a tener una reunión con ellos como hizo con otras agrupaciones (ver aparte).
A su turno, el industrial Lascurain desechó las teorías sostenidas por algunos sectores empresarios y financieros sobre que las metas piqueteras pasarían por la desestabilización y el caso, y reconoció que "los piqueteros buscan solución al problema social".
"Mucha de esta gente ha quedado sin trabajo. Muchos jóvenes están hoy ante la imposibilidad de conseguir su primer trabajo", indicó el número dos de la UIA, quien remarcó que "es responsabilidad de este gobierno y del próximo atender la situación social".
Con todo, Lascurain señaló que "nadie puede ser feliz en un país donde haya tanta gente pobre", y advirtió que "los índices de pobreza son cada vez más altos".
La Ciudad
