David Nalbandian, flamante top-ten del ránking mundial de la ATP y principal carta de triunfo del equipo de Copa Davis de la Argentina para la serie ante Alemania, lució en la práctica de ayer la camiseta de River Plate que le obsequió el incipiente goleador Fernando Cavenaghi, y adelantó que le está costando más de lo previsto adaptarse a la cancha de polvo de ladrillo enclavada en el club de Núñez.
La aparición del cordobés de Unquillo con la "nueve" de Cavenaghi fue la nota saliente de una jornada más en doble turno, en la que Gastón Gaudio lució como el más adaptado para la serie a jugarse entre el viernes y domingo próximo, mientras que Juan Ignacio Chela de a poco va entrando en ritmo y Lucas Arnold se limitó a tareas propias de su especialidad, el dobles.
"Soy fanático de River y decidí utilizar la camiseta que me regaló Cavenaghi para ver si así me adapto más rápido a esta cancha. Mis ídolos son Francescoli, a quien casi no vi jugar en su mejor época en el club, y de ahora el chileno Marcelo Salas, Hernán Crespo y por supuesto, el Torito", comentó Nalbandian, en alusión al reciente goleador del Sudamericano Sub-20 de Uruguay.
El cordobés de 21 años -tenía apenas cuatro en la primera época de Francescoli en River-, se puso más serio a la hora de analizar el estado de la flamante cancha de River Plate y su incidencia en el desarrollo de la serie.
"La lluvia de estos últimos días dejó la cancha más pesada aún, tenemos que juntarnos nosotros y analizar si nos conviene que esté tan lenta, demasiado para mi gusto", avisó Nalbandian, a pocos días del inicio de la eliminatoria por la ronda inicial del Grupo Mundial.
El cordobés practicó ayer con Gaudio -el Gato se mueve como "pez en el agua" en la cancha- y también lo hizo con el tandilense Mariano Zabaleta, quien volvió a prestar su colaboración al equipo, al punto que terminó la jornada jugando dobles ante Arnold y el Flaco Chela.
El capitán Gustavo Luza, en tanto, restó importancia al estado de la cancha y prefirió centrar su atención en el trabajo del dobles -estará Arnold y posiblemente Nalbandian-, un punto difícil si se tiene en cuenta la experiencia de David Prinosil y Michael Kohlman, la dupla germana.
Prinosil ganó diez títulos de dobles en su carrera, mientras que Kohlaman obtuvo dos, y ese punto favorecería, en principio, al equipo visitante que conduce Patrick Kuhenen, quien por su parte confía en que Rainer Schuettler se lleve los dos singles.
"Schuettler es el que mejor está jugando de ellos, pero no hay dudas de que su carrera tiene un antes y después de Australia, y de que su juego decae de sobremanera en canchas lentas" analizó Luza respecto del reciente finalista del Grand Slam jugado en Melbourne, quien alcanzó su primavera tenística a los 26 años.
Argentina volverá a entrenar mañana, en la que será la última jornada en doble turno, puesto que el jueves asistirán al sorteo de la serie por la mañana y recién en la tarde volverán a River, para la sesión de puesta a punto final de cara a los dos singles del viernes, cuando el equipo comience a jugar sus cartas y ratificar o desmentir el favoritismo que se le adjudica en la previa.
El ganador de la serie entre Argentina y Alemania enfrentará en abril próximo al vencedor de la eliminatoria entre la República Checa y Rusia, que se medirán el próximo fin de semana en Praga.
Si Argentina supera a los alemanes, será nuevamente local, ya sea ante checos o rusos, y en una proyección del cuadro de la Davis podría encontrarse con España en septiembre, aunque para eso hay tiempo y primero deben dejar atrás a los teutones. (Télam)
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