-¡Pedro, mirá quién vino! El Cuqui.
-¿Quién?
-Silvani.
Sí, en forma sorpresiva para todos los medios, Walter Gustavo Silvani apareció ayer en el reinicio de los entrenamientos rojinegros tras la pretemporada en Mar del Plata. Sí, el Cuqui es el segundo refuerzo para el Clausura, aunque por sus antecedentes, sin lugar a dudas, se lleva el primer lugar.
"Hacía unos días que sabía que venía a Newell's" explicó Silvani antes de confiarle a Ovacion que "antes de venir hacia Rosario me fijé en internet y ningún medio decía nada, por eso le pregunté a mi representante si era cierto que en Newell's me querían".
No siempre las sorpresas son lindas, pero en este caso seguramente todos los leprosos deben estar contentos con la llegada de Silvani. El 9 goleador del que tanto se habló y que Veira quería con experiencia. "Si me trajeron por algo es, él me verá con esas condiciones", destacó el Cuqui.
Hace un mes que estaba en España, "entrenando por mi cuenta después de estar tres meses en el Al Wasl de Emiratos Arabes, de donde me desvinculé porque no me cumplieron con lo que me habían prometido y porque mi familia no estaba bien. Entonces decidí volver. La idea original era regresar a México, pero ya no se podía y en España las propuestas eran en equipos que peleaban por no descender. Algo que no quería. Y surgió la propuesta de Newell's para pelear por cosas importantes".
Y firmó "hasta junio, con una claúsula de renovación por un año. Pero para eso hay tiempo, ya veremos. En estos seis meses, si tanto el club como yo estamos contentos, seguiremos sin problemas".
"¿Por qué Newell's? Simple, mi representante me habló de esta posibilidad y como sabía que estaba el Bambi le dimos para adelante", confió Silvani, quien habló poco con Veira "porque llegué el domingo a la noche y hoy entrenamos en doble turno, pero tenemos tiempo para seguir hablando. Por ahora me dijo que vea cómo se mueven mis compañeros, cuáles son sus características y que mañana (por hoy) haremos una práctica de fútbol".
Ya está el goleador con experiencia que solicitó el técnico. El Cuqui Silvani es el hombre. El que trae en su currículum una gran cuota de gol. Pero no es de esos que prometen una cantidad. Sabe que "en mi puesto hay que hacer goles. Para eso me trajeron, pero no soy de ponerme una cantidad como meta, si hacer 10 ó 15 goles. Quiero jugar bien y, si lo logro, los goles vendrán por consecuencia de ello".
La gran pregunta es si está para jugar. Y él lo explicó así: "En lo físico me encuentro bien, estuve en competencia hasta hace casi un mes y después entrenando solo. Creo que estoy en un nivel aceptable, y además quedan dos semanas para acercarme al de mis compañeros. Lo que sí puedo asegurar es que si fuera por mi y el torneo comenzaría mañana, jugaría. Pero lo decidirá el técnico. Eso sí, tengo unas ganas bárbaras de jugar".
La pelea por la titularidad
La característica principal del Cuqui Silvani es ser un hombre de área, goleador. Justo lo que necesita el Newell's de Veira para aprovechar el muy buen nivel de Mauro Rosales, el encargado principal para ponerles pelotas de gol. "Ojalá me toque jugar y pueda aprovechar sus centros. Me hablaron muy bien de Rosales y espero poder complementarnos si debemos jugar juntos", sostuvo el delantero.
Y cuando en Newell's parecía que no llegarían refuerzos y la pelea por el puesto de centrodelantero se limitaría a dos o tres, hoy el Bambino tiene muchas más opciones. "Sí, somos unos cuantos delanteros y eso es bueno. Será una sana competencia, beneficiosa para nosotros y para el equipo. En el fútbol pasan estas cosas y habrá que rendir al máximo para ganarse un lugar", reconoció el Cuqui al hablar de su pelea con Sacripanti, Lagorio, Echeverría y Saucedo por el puesto de nueve.
Una vida de trotamundos
"Ya pasaron casi 9 años de que me fui de Argentina, y en este tiempo crecí tanto como jugador y como persona. Ya lo verán y podrán sacar sus conclusiones", disparó Silvani al hablar de aquel goleador que prometía en River, dónde jugó 132 partidos entre 1989 y 1995. El mismo que no terminaba de convencer a los millonarios y por eso en medio de esos años estuvo una temporada en Argentinos Juniors, en el 94, donde jugó 17 partidos y marcó 7 tantos.
"Después de River me fui a la U de Chile, fue una buena experiencia al jugar en la Copa Libertadores. De ahí salió la posibilidad en Extremadura durante seis meses y después me compró el Salamanca, donde estuve cuatro años", repasó Silvani.
Hasta que lo llamaron de México. "Salió la oferta del Pachuca, fui un año y medio, ganamos una liga, la copa de campeones de la Concacaf. Es más, pensé que nunca más me iría de ese equipo y que iba a terminar ahí, pero me tentaron con una oferta de Emiratos Arabes (Al Wasl) y decidí aceptarla, en lo que considero que fue un error".
Y ahora llegó a Newell's, un club del que "tengo pantallazos por lo que vi en televisión. La hinchada es motivante y llena el estadio todos los partidos y por como se vive el fútbol en Argentina, que no en todo el mundo es así, espero empezar a vivirlo ya. Quiero reencontrarme con ello".
La Ciudad
