El mundo contempló asombrado la dramática desintegración del transbordador espacial y envió palabras de condolencia a los familiares de los astronautas. La otra potencia espacial, Rusia, transmitió su pésame a Washington, pero dijo que el desastre no afectaría el lanzamiento de la nave de carga Progress, con suministros para la Estación Espacial Internacional (ISS), que debe despegar hoy del cosmódromo Baikonur, en Kazakistán.
En el Vaticano, el Papa Juan Pablo II rezó por los astronautas muertos durante una misa en la basílica de San Pedro.
En la India también sintieron la tragedia: la primera astronauta de origen indio, símbolo de orgullo nacional, se encontraba a bordo del Columbia. Miles de personas al norte de la India desafiaron ayer una fría noche invernal para hacer sonar las campanas de sus templos y orar por un milagro, tras la desintegración del transbordador espacial donde iba Kalpana Chawla, quien se mudó a Estados Unidos en 1982.
El presidente de la Autoridad Palestina, Yasser Arafat, presentó anoche sus condolencias al presidente Bush. "Arafat expresó en su nombre y en el del pueblo palestino sus condolencias al presidente Bush y a las familias de los siete astronautas después de este doloroso accidente", se indicó oficialmente.
Los líderes Alemania, Francia y Gran Bretaña también enviaron condolencias.
El presidente de México, Vicente Fox, llamó por teléfono a su homólogo estadounidense George W. Bush para ofrecerle su apoyo y condolencias. El gobierno de Cuba hizo lo propio y envió su pésame.
Entre los mensajes, también, se cuenta el del presidente Eduardo Duhalde.
Sin embargo, muchos iraquíes, que enfrentan la posibilidad de un ataque estadounidense a su país, dijeron que la tragedia era una venganza de Dios.