Las altísimas temperaturas traen consigo consecuencias nefastas en niños y ancianos fundamentalmente. En los distintos hospitales aumentaron las consultas por casos de deshidratación y cuadros de gastroenteritis. En la guardia del Hospital del Centenario se calculó ayer que el 50 por ciento de los pacientes que fueron atendidos presentaban problemas de hipotensión y deficiencias en la hidratación. Lo mismo ocurrió en el Provincial, pero allí dos adultos de 65 y 67 años quedaron internados como consecuencia de la deshidratación. En el Roque Sáenz Peña también se aumentaron las consultas por las dificultades del golpe de calor, con mareos y nauseas. Pero todas las víctimas de las temperaturas infernales fueron dadas de alta, tras ser compensadas. En el caso de las guardias pediátricas, no son tan frecuentes las consultas por problemas de hipotensión. Sin embargo, permanentemente llegan los pacientes que presentan cuadros de gastroenteritis generados por los virus propios del período estival.
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