Año CXXXVI
 Nº 49.721
Rosario,
lunes  13 de
enero de 2003
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Casi todos en Tandil
Messera se sumó al trabajo canalla. Falta Petaco

Mauricio Tallone - Javier Parenti / La Capital

El plantel de Rosario Central arribó anoche cerca de las 21.40 a la hostería Casagrande de la ciudad de Tandil para cumplir durante dos semanas con los trabajos de pretemporada. Como había trascendido el viernes pasado, Mariano Messera no descendió del micro que trasladó a la delegación, sino que lo hizo 20 minutos antes proveniente de La Plata acompañado de un socio de uno de sus representantes, Juan Simón. Otro de los integrantes del contingente que pisó suelo tandilense por las suyas fue el entrenador Miguel Angel Russo, quien aproximadamente a las 21 llegó en su auto particular junto al secretario técnico Rubén Massei.
Apenas el grueso de la delegación pisó el hall de la hostería, Messera fue al encuentro de sus nuevos compañeros y se fundió en un cálido abrazo con Gustavo Barros Schelotto, con quien comparte su fanatismo por Gimnasia y Esgrima aunque nunca coincidieron dentro de un campo de juego cuando ambos vistieron la casaca tripera.
Mientras el dúo se quedó charlando muy amistosamente en el ambiente aledaño al hall de la hostería, la mayoría de los dirigidos por Russo enfiló hacia sus respectivas habitaciones para dejar sus equipajes y enseguida bajar a cenar. Tras degustar como menú tarta de jamón y queso, pollo, ensaladas varias, flan y gaseosas dietéticas, algunos de los muchachos optaron por recorrer las instalaciones del refugio transitorio y pasadas las 23 se fueron a descansar porque hoy la rutina inaugural contempla triple turno de entrenamiento.
Precisamente, con respecto a la programación de los trabajos previstos para hoy, el preparador físico Guillermo Cinquetti especificó: "Los jugadores se levantarán a las 7, a las 7.30 está previsto el desayuno y a las 8 iremos al gimnasio. Luego nos trasladaremos a los campos de golf para cumplir con la primera sesión física y por la tarde concurriremos a la quinta de la familia Barzola".

Salida desde el Gigante
Y la partida desde el Gigante de Arroyito fue con el apoyo de familiares e hinchas que no se cansaron de pedirles a los jugadores, además de los autógrafos y fotos de rigor, el máximo esfuerzo y dedicación para que lleguen en las mejores condiciones para afrontar el Clausura 2003, en el que habrá que pelear codo a codo con ese fantasma llamado descenso.
El horario de partida del micro estaba previsto para las 13, pero tanto Hugo Gottardi como el profesor Guillermo Cinquetti ya disfrutaban de un café en el bar del estadio esperando a los principales protagonistas.
Y los primeros en llegar fueron el Colorado Fassi y el rubio Acoglanis, a las 12.35 y acompañados por padres, hermanos y novias, como la mayoría de los jugadores.
Pero el grueso del plantel llegó casi sobre la hora. Pino, Mandra y Manchado llegaron en taxi y cinco minutos después fueron apareciendo Gasparini, Encina, Erroz, Lucas García, Ruggiero, Andrés Díaz, Herrera, los Quinteros (Marcelo y Daniel), Vitamina, Gaona, Leonforte, Cárdenas, Castellano, el Cata Díaz, Papa, Poy, Figueroa, Ferrari, Ojeda, el Mellizo Gustavo Barros Schelotto, Talamonti, Tom Arriola y el último en subir al Chevallier 4480 fue el Chelito Delgado. Y autorización para Ovacion de sacar fotos de despedida mediante, el micro salió a las 13.05 con destino final, y sin escala, a Tandil.
Allá esperaba el entrenador Miguel Angel Russo, quien había partido a la mañana desde Capital Federal en su automóvil ("necesitábamos un vehículo allá y por eso él viajó antes", aclaró Gottardi), y ahí mismo llegó también por su cuenta Mariano Messera, el refuerzo tan pedido por el DT.



Luciano Figueroa ingresa a la hostería Casagrande.
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