El gobierno puso en marcha ayer, mediante su publicación en el Boletín Oficial, un Programa de Recuperación de Obras Sociales en Crisis para "facilitar su reconversión y optimizar su funcionamiento" en la prestación de servicios médicos asistenciales integrales. Ante la "grave crisis económica y financiera" que atraviesan los agentes de seguro de salud, el gobierno dispuso "implementar la creación de un plan que tendrá como objetivo brindarles herramientas de tipo financiero".
Este programa, según detalle de la resolución publicada ayer en el Boletín Oficial, "incluirá la gestión de un préstamo de asistencia a obras sociales en crisis, que será otorgado a todos los agentes del seguro de salud que presenten un plan ajustado a los criterios que se definan por la Superintendencia de Servicios de Salud".
Este auxilio será otorgado a través de "un fondo fiduiciario" gestionado a través de instituciones bancarias y mediante el procedimiento aún por establecer en la reglamentación de esta resolución.
Los montos de cada asistencia financiera "deberán tener como pautas de otorgamiento un análisis económico financiero, institucional y prestacional de la entidad, y su capacidad de repago".
Los antecedentes de la norma se remontan al decreto 486 del 12 de marzo de 2002, que dispuso el dictado de la Emergencia Sanitaria Nacional. Es de notar que la crisis de las obras sociales incide en la atención hospitalaria porque estas instituciones deben atender a cientos de trabajadores que perdieron su cobertura.
En tanto, como indicara el domingo último La Capital, uno de los factores que provocaron la crisis de las obras sociales, se encuentra en el atraso de los aportes patronales a la Superintendencia de Servicios de Salud. El titular de ese organismo indicó a mediados de agosto 2002 que "del aporte que deben hacer llegar los empleadores, recibimos un 46 por ciento", lo cual provoca dificultades, ya que la cobertura aumentó en un 50 por ciento.
Crisis en La Rioja
La Asociación de Trabajadores de la Sanidad de La Rioja (Atsa) inició ayer una serie de jornadas de protesta en defensa del empleo en clínicas y sanatorios privados, tras denunciar que la obra social estatal (Apos) demora el pago de prestaciones realizadas y pone en peligro las fuentes de trabajo.
En una asamblea de delegados de Atsa realizada ayer se declaró el estado de "movilización, alerta y asamblea permanente", tras conocerse que algunos sanatorios y clínicas podrían despedir personal ante el atraso de la Apos en el pago de prestaciones. Incluso, dos de esas empresas médicas habrían iniciado ya, ante la Dirección de Trabajo, procedimientos preventivos de crisis, según dejaron trascender fuentes sindicales.
Por eso, el gremio realizará también una marcha de antorchas pasado mañana en la noche, de la que también participarán empleados y médicos de las clínicas y sanatorios afectados.
El conflicto se inició en diciembre pasado, cuando la obras social estatal riojana denunció que los sanatorios y clínicas sobrefacturaban las prestaciones y decidió cancelar los convenios prestacionales para fijar nuevos aranceles y un "techo" al gasto mensual disponible.
A partir de allí, se llegó a un acuerdo transitorio que, durante enero, prevé transferencias de distintas sumas de dinero desde la APOS a las clínicas en concepto de prestaciones efectuadas, pero a cuenta de una auditoría general que determinará su legalidad. Sin embargo, Atsa denunció ayer que la Apos no está cumpliendo con esas transferencias y que, por esa razón, las clínicas advierten la posibilidad de reducir su personal para adecuar su costo salarial a la nueva situación.
El problema radica en que todos los prestadores privados de la salud en La Rioja dependen básicamente de la obra social estatal porque Apos tiene como afiliados a los 30 mil empleados estatales y sus familias que, en total, suman unas 140 mil personas.
Mientras tanto, el titular de Apos, Rafael Cayol, rechazó la actitud gremial, dijo que la deuda sobre las transferencias pautadas para la primer semana de enero sólo alcanza a los 210 mil pesos y afirmó que esa deuda será cancelada en los próximos días. (Télam)